La pelota de papel

Real Madrid, así en la Copa como en la Liga

  • El problema físico de Messi ha forzado al Barcelona a pisar embrague y reducir marcha, lo que ha aprovechado el equipo de Solari para empezar a meterle miedo por el retrovisor: a 6 puntos ya

Casemiro celebra su gol al Atlético junto a Sergio Ramos, Vinicius y Lucas Pérez.

Casemiro celebra su gol al Atlético junto a Sergio Ramos, Vinicius y Lucas Pérez. / Juanjo Martín (Efe)

La prueba de competitividad que ofreció el Real Madrid en el Camp Nou (1-1) el pasado miércoles, ante un Barcelona que empezó con Messi sentado en el banquillo, tuvo su repercusión directa en la Copa del Rey, que era por lo que litigan, con esa vuelta pendiente para el miércoles 27 de este mes en el Santiago Bernabéu, pero también tuvo su consecuencia indirecta en la Liga. Los blancos vinieron a decirle al campeón y líder que van de verdad. Que no hay que darlos por muertos en la competición donde son los reyes. Ese aviso cobró toda su dimensión el pasado fin de semana, con la demostración de fortaleza del equipo de Santiago Solari en el Wanda Metropolitano (1-3) y los titubeos del Barcelona en San Mamés, donde se agarró a la recia manopla de Ter Stegen para salir por su propio pie de Bilbao con un punto como mal menor.

El golpe de autoridad del redivivo Real Madrid en el nuevo coliseo colchonero, a las maneras que tantas veces interpretó en el Vicente Calderón, deja al Atlético de Simeone en su puntuación más baja en la jornada 23ª desde que el muy competente preparador argentino dirige desde el arranque de una temporada a los suyos –llegó a mitad de la campaña 2011-12 como relevo de Gregorio Manzano, por lo que ésta no cuenta–. Hace dos años, el Atlético sólo sumaba 45 puntos, uno más que hoy (44). Cuando ganó la Liga, acumulaba ya 57 puntos a estas alturas.

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Paradójicamente, hay equipos a los que no le siente nada bien competir una sola vez a la semana, pues los jugadores están habituados a programas de entrenamientos de tres-cuatro días y los propios miembros del cuerpo técnico también ven, analizan y diseñan mejor las sesiones a corto plazo. Y es lo que parece traslucir este Atlético, que ha disfrutado de dos semanas limpias para afrontar la visita al Betis y la llegada del Real Madrid al Wanda y en ambas ocasiones ha caído con un juego de perfil muy bajo.

Se da el caso, además, de que tanto béticos como madridistas acometieron el partido ante el Atlético tras sufrir un enorme desgaste copero, los verdiblancos ante el Espanyol con prórroga incluida, y los merengues ante el rival más encarnizado y en el campo más hostil, el Camp Nou.

Otra vez sale a escena el último clásico de Copa. Fue extraño ver a Messi sentado en el banquillo tras su percance físico ante el Valencia en su anterior actuación, en la Liga. Poco después de empatar Malcom salió a por la victoria y no pudo ser. Tampoco decidió esta vez en Bilbao para sofocar la reacción madridista, confirmada un día antes en el derbi. El leve parón de Messi obligó al Barça a meter embrague y reducir marcha. Deberá acelerar otra vez ya con Dembele de vuelta. Total, que el Madrid, que estaba a 10 puntos hace dos jornadas, ya está a 6. Y con la visita del Barça al Bernabéu aún pendiente.

El péndulo de la Liga apunta ahora a Valdebebas, donde Solari se ha hecho con el control del vestuario a pesar del espinoso caso Isco. Benzema ha dejado de parecer uno que pasaba por allí y ejerce de mascarón de proa arriba, atrás Sergio Ramos es el líder y el goleador desde el punto de penalti, y puntales como Modric, Casemiro, o Carvajal avanzan hacia su versión habitual en espera de que lo hagan Bale, Kroos, Marcelo.

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