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El Portugal-Bosnia copa toda la atención

  • Cristiano Ronaldo busca en casa un billete obligado · Croacia e Irlanda ya están casi clasificadas · Chequia defiende un 2-0

La selección portuguesa espera aprovechar al máximo su condición de local hoy cuando dispute la vuelta de la repesca para la Eurocopa de 2012 ante Bosnia.

El encuentro se disputará en Lisboa cuatro días después de la ida, que acabó con empate a cero en la ciudad bosnia de Zenica. Portugal necesitará un esfuerzo supremo para imponerse en la eliminatoria de play off.

"Está más o menos igualada. Por supuesto que jugaremos en buenas condiciones, con nuestros aficionados detrás, en casa, pero será muy difícil. Conseguimos un buen resultado fuera y tenemos que finiquitar las cosas en el partido de casa", dijo el delantero portugués Cristiano Ronaldo.

Mientras Portugal tendrá que realizar un trabajo duro, Croacia, Irlanda y la República Checa están muy bien posicionadas de cara a los partidos de hoy.

Croacia recibe a Turquía después de un triunfo por 3-0 en Estambul, Irlanda sorprendió a Estonia con un 0-4 fuera de casa y la República Checa viajará a Montenegro con una renta de 2-0.

Portugal venció a Bosnia dos veces por 1-0 en la repesca del Mundial de 2010, pero aparte de una victoria por 3-1 frente a Dinamarca, no ha sido convincente en sus partidos de casa en la clasificación para la Eurocopa 2012.

Las cosas podrían haber sido más fáciles para el equipo que entrena Paulo Bento, ya que necesitaban un punto en la última jornada ante Dinamarca. Pero la derrota por 2-1 les mandó a la repesca. Ronaldo desperdició una gran oportunidad el viernes, pero Portugal también tuvo suerte cuando Ibisevic falló dos claras ocasiones al final del partido.

"Como esperábamos, el momento decisivo será en Lisboa. En secreto, teníamos la esperanza de ganar, pero considerando todas las cosas tenemos que estar satisfechos con un empate. Hemos demostrado que podemos competir con Portugal", dijo el medio centro bosnio Senad Lulic.

Portugal alcanzó la final continental en 2004, año en el que era el país anfitrión, las semifinales en 2000 y los cuartos de final en 2008. No clasificarse sería un duro revés. Para los visitantes, por contra, sería el primer billete para un evento internacional.

Turquía, mientras, llegó a las semifinales en la última edición, pero ahora necesita un milagro. "Soy el responsable del resultado. Ahora es importante que los jugadores jueguen por el honor, por sí mismos y por su país", dijo el asediado seleccionador de Turquía, el holandés Guus Hiddink.

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