La selección española recibió el domingo ante Suiza un claro aviso: los partidos se deciden en las áreas y los detalles pueden marcar el destino de cualquier equipo durante el inminente Mundial de Rusia.

El combinado de Julen Lopetegui disputó su primer partido de preparación para la Copa del Mundo y cedió un empate 1-1 ante Suiza dentro de un partido definido por la falta de gol de los españoles y un error de su guardameta, David de Gea.

España dominó el juego, pero no las áreas. Fiel a su estilo, acaparó el balón y sumó buenas llegadas, pero volvió a exponer una de sus carencias más acusadas durante los últimos años, como es la dificultad que tiene para traducir sus ocasiones en gol. De hecho, su único tanto lo marcó un defensa, Álvaro Odriozola, sustituto del lesionado Dani Carvajal.

El equipo de Lopetegui no pasó prácticamente ninguna dificultad en defensa, pero Suiza sacó mucho de una acción aislada. Concretamente de un error de De Gea, quien será el cancerbero titular de España por primera vez en un Mundial.

"El equipo ha hecho muchas cosas buenas. No hemos estado acertados en las opciones que hemos tenido. Pero la intensidad, el ritmo y la continuidad ante un equipo como Suiza es lo más importante. Seguro que otro día aprovechamos la mitad de las otras ocasiones que hemos tenido", destacó su seleccionador al finalizar el duelo.

El equipo español, invicto durante la "era Lopetegui", asumió con total serenidad un empate que no esperaba, por más que Suiza sea una selección mundialista. Confía en que el paso de los días afine la preparación del equipo. Además, le falta incorporar al equipo a piezas tan básicas como Sergio Busquets, Sergio Ramos o Isco.

Sin embargo, España perdió una buena ocasión de desterrar el viejo debate sobre el 9, la discusión sobre el delantero del equipo. Ante Suiza volvió a jugar Diego Costa como punta y apenas tuvo ocasiones claras.

Iago Aspas actuó en la banda derecha y se le notó desubicado, y Rodrigo Moreno entró en la segunda parte para dar la razón a quienes consideran que es el mejor delantero para el combinado, por más que el jugador del Valencia no sea un 9 puro.

"Siempre hay cosas que mejorar. Estamos en una fase muy inicial de la preparación. Hay que seguir trabajando y seguir preparándonos", razonó Lopetegui.

Lo que parece evidente es que el seleccionador español ya tiene formado un once básico, probablemente con cinco centrocampistas cuando se incorpore Isco, y la única duda es quién será el delantero. Un eterno déjà vu.

El sábado se obtendrán más certezas con un nuevo amistoso, esta vez ante Túnez. Se jugará en Krasnodar, cuartel general durante el Mundial, y será el último partido de España antes de su debut en el torneo, que será el 15 de junio ante Portugal en Sochi.