Una canasta tras un rebote ofensivo de Cándido Matoso sobre la bocina que marcaba el final de la segunda prórroga dio este domingo la victoria a la Unión Linense de Baloncesto (ULB) en su visita al Tortas del Casar de Cáceres. Un triunfo logrado en un partido gris y lleno de imprecisiones, en el que los de La Línea fueron demasiado tiempo a remolque, pero que corta una racha de dos derrotas y que sitúa a la escuadra de Vicente González a una distancia salvable de la quinta plaza y, lo que es más importante, con una notable renta sobre un rival directo en caso de tener que pelear por la permanencia.

En el primer cuarto los de casa, que echaban en falta a dos de sus jugadores seniors, impusieron un fuerte ritmo defensivo y su velocidad ante una ULB que no encontraba la fórmula para parar a Álex Jorda (21-13).

Al descanso vencían también los extremeños (32-27). Los de La Línea, que no terminaban de entrar en el duelo, se vieron diez abajo (27-17, en el minuto 15), pero un tiempo muerto hizo ver a los visitantes que tenían superioridad dentro y empezaron a limar diferencias, hasta llegar a colocarse a tres (30-27).

La ULB llegó a empatar (34-34), pero en ese momento aparecío Moi Jiménez, que es natural de San Fernando, para despegar al filial del Cáceres y el marcador se fue al 50-38. Cinco puntos seguidos de los linenses le mantenían con vida (50-43).

En el último tramo entre que a los locales se les acabó la frescura y a que los albinegros (esta vez totalmente de blanco) subieron su nivel defensivo las tornas se cambiaron. De hecho Tortas del Casar solo anotó ocho puntos en esos diez minutos por 15 de los visitantes.

 En los últimos compases unos y otros disfrutaron de un ataque para haberse evitado la prórroga. Da la casualidad de que el último balón fue lazado por Matoso, que más tarde se resarciría.

La primera prórroga fue un auténtico despropósito por parte y parte. Cada equipo anotó solo cuatro puntos. La ULB evitó la derrota con su única canasta en juego a falta de ocho segundos. Los locales malograron el último lanzamiento (62-62)

El segundo tiempo extra fue algo más vistoso. A falta de 50 segundos ganaba la ULB por cinco, pero se dejó igualar, otra vez con Moi Jiménez en plan anterillero, así que fue necesaria una canasta de Cándido Matoso tras capturar un rebote para que los de La Línea lograsen una victoria que vale su peso en oro.

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