El Club Deportivo San Roque vuelve a levantar cabeza. El conjunto rojillo doblegó este domingo al Peñarroya cordobés por 1-0 gracias a un solitario tanto de Borja Maderal cumplida la media hora de partido, que le permite adelantar en la tabla a un rival directo en la lucha por la permanencia. Con este resultado, los de Mariano Marco –técnico del San Roque– suman tres puntos después de tres jornadas sin vencer y se colocan decimocuartos con 21 puntos en el grupo I de División de Honor Andaluza.
El San Roque empieza a erigir un pequeño fortín entorno al Manolo Mesa tras su trabajado triunfo ante el Peñarroya. Con esta victoria, los sanroqueños logran hilar seis partidos sin conocer la derrota como locales, todo un mérito para lo irregular que estaba marchando la temporada.
El bloque rojillo le ha cogido el gusto a eso de presentar batalla ante cualquier rival. Y la verdad es que la cita lo requería. Los sanroqueños necesitaban ganar ante un adversario directo en la clasificación, del que se deshicieron con sufrimiento. Los goles parecen resistirse a caer del lado del San Roque cada semana, pero por fortuna esta jornada los de Mariano cuajaron un partido contundente en línea defensivas para blindar el único gol que deparó la contienda.
En el primer tiempo, el San Roque practicó ese fútbol del que gusta tanto ante su público, hasta donde le permiten las lesiones, para poner cerco al campo del contrario. Los anfitriones fueron con todo y cumplida la media hora, percutieron por banda y colgaron un centro al área que aprovechó el algecireño Borja Maderal para ponerlos en ventaja.
En el segundo tiempo, lo peor para los de casa fue la lesión de Juanma, que sufrió en un tobillo. Mariano se vio obligado a sustituirle por Luismi. Los de casa plasmaron su superioridad en el terreno de juego e incluso pudieron aumentar la diferencia en el electrónico en la segunda mitad.
Después de la derrota de la semana pasada contra el filial del Recreativo, Mariano no quería ningún sobresalto de última hora, como alguna vez ha ocurrido esta temporada en el feudo sanroqueño. El vallisoletano puso en liza a varios hombres de refresco para mantener intensas la defensa y la presión de los suyos hasta el último momento.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios