El Fútbol Club Barcelona se adjudicó el primer título de la temporada al superar al Real Madrid en la Supercopa. La escuadra azulgrana no fue superior en el partido, pero sí más resolutivo de cara al marco contrario.

Los blancos gozaron, como en el partido de ida, de la posesión del balón durante la mayor parte del encuentro, pero no fueron capaces de plasmar esa superioridad ante un Barça que aún no estando en plena forma cuenta con el jugador más decisivo del mundo: Messi. El argentino dio el primer gol e hizo los dos restantes para decidir una eliminatoria intensa y apasionante.

El Real Madrid comenzó imprimiéndole un ritmo endiablado al partido y presionando al Barcelona muy arriba. Los culés no eran capaces de pasar del centro del campo ante el gran trabajo defensivo de la línea atacante madridista. Eso hasta que Messi bajó a recibir el balón en el centro del campo y vio el desmarque de Iniesta, al que dejó solo ante Casillas y el albaceteño no perdonó en el mano a mano. Por entonces comenzó a dejarse el desajuste de la zaga merengue, que tuvo un par de despistes más que le pudieron costar muy caros a los de Mourinho.

A pesar del tanto encajado el Madrid no se resintió en su juego y siguió buscando la meta de Valdés, a quien logró batir Cristiano Ronaldo al meter la pierna en un centro chut de Benzema. El 1-1 dio paso a un partido más abierto y cualquiera de los dos conjuntos pudo anotar. Primero fue el turno del Barça, pero Casillas metió una soberbia mano para evitar el gol de Pedro en el 21’. Fue tras un nuevo error de la zaga madridista.

Benzema probó fortuna poco después, pero Cristiano Ronaldo estuvo más cerca de adelantar a los suyos con un trallazo que escupió el larguero tras tocar Valdés. Ozil volvió a intentarlo para el Madrid ante un Valdés que de nuevo se mostró infranqueable.

Sobre la media hora de partido decayó el ritmo del juego, hasta que Messi probó a Casillas, que esta vez le ganó la partida en el uno contra uno al argentino. Sin embargo, el diez azulgrana no falló al filo del descanso. Tras un saque de esquina el balón llegó a Piqué, que conectó con Messi con un taconazo y éste puso el 2-1 justo antes de enfilar el camino a la caseta.

Con la ventaja en el marcador el Barcelona entregó el cuero en la segunda parte y el Real Madrid disfrutó de la mayor parte de la posesión, aunque apenas inquietó la meta de Valdés. Tampoco ayudó a los blancos la tangana que se originó tras una entrada de Marcelo sobre Messi que tuvo el juego parado durante bastanates minutos.

A pesar del dominio blanco fue el Barcelona el que estuvo a punto de aumentar su ventaja. En el 65’ Iniesta arrancó desde el centro del campo y combinó en la frontal con Messi, cuyo disparo lo desvió Casillas a córner.

La primera ocasión clara para el madrid llegó en el 70’ en un córner forzado por Pepe de forma muy poca ortodoxa que cabeceó Ramos, libre de marca, fuera por muy poco.

El premio para el dominio de los merengues llegó en el 81’ en un córner que anotó Benzema tras encontrarse con Valdés en el primer remate.

Pero tras encajar el segundo el Barcelona se echó arriba por primera vez en toda la segunda mitad y comenzó a carburar con el debut de Cesc como telón de fondo. Siendo de nuevo fiel a su equipo, el conjunto azulgrana comenzó a cercar el área de Casillas y llegó el definitivo 3-2 en un nuevo tanto de Messi, que enganchó un disparo inapelable a centro de Adriano desde la derecha.

El argentino pudo hacer el cuarto ya en el tiempo añadido, pero Casillas le ganó la partida.

Antes del final hubo tiempo para que se originase una tangana después de una dura entrada de Marcelo sobre Cesc, que se saldó con las expulsiones del propio brasileño y de Özil.