Al Algeciras se la ha atragantado la carretera en la segunda vuelta. Las sensaciones en el terreno de juego pueden ser debatibles, pero los números tienen una sola voz: los albirrojos sólo han sumado dos puntos a domicilio en sus últimas cuatro salidas, un pobre bagaje para un aspirante al ascenso a Segunda división B.

El empate cosechado el pasado domingo en Sevilla (1-1) dejó un poso agridulce entre la parroquia algecirista. Es verdad que los albirrojos merecieron más, pero igual de cierto es que los pupilos de José Antonio Asián lastran una terrible falta de pegada cuando juegan lejos del Nuevo Mirador.

2 de 12Puntos. El bagaje más reciente lejos del Nuevo Mirador es pobre para un aspirante el ascenso

Desde el triunfo en el Ciudad de Alcalá el 28 de enero (0-3), el Algeciras ha rendido cuentas fuera de casa con Lebrijana (1-1), Ceuta (1-0), Utrera (1-0) y Sevilla C (1-1). En las cuatro visitas el azar tampoco jugó a favor aunque lo más preocupante es la cantidad de ocasiones que se fueron al limbo.

Esta racha a domicilio es la peor del Algeciras en la presente campaña, ya que nunca estuvo más de tres viajes seguidos sin una victoria.

La plantilla de Asián terminó la primera vuelta del campeonato del grupo X de Tercera como el tercer mejor visitante con 17 puntos en nueve viajes (cinco victorias, dos empates y otras dos derrotas). Con nueve partidos fuera, sólo la Balompédica Lebrijana sumó más (18 puntos).

La historia cambia en lo que va de 2018 ya que los rojiblancos llevan seis salidas con un saldo de seis puntos (un triunfo, tres empates y dos tropiezos). El Ceuta, el segundo, lleva doce en los mismos encuentros, el Cádiz, el líder, suma 11, y la Lebrijana cuenta 10 en cinco visitas, ya que tiene pendiente la que se aplazó por la lluvia en Huelva.

El Algeciras no se puede permitir mucho más tropiezos si quiere mantener su privilegiada posición en la recta final. La hoja de ruta en las últimas ocho jornadas marca cuatro salidas con muchas curvas: Espiel, Guadalcacín, Cádiz y Gerena.

A los de Asián no les queda ni una sola perita en dulce por un camino en el que se cruzarán con dos rivales que se juegan la vida en la categoría y otros dos que están en la puja por el ascenso, aunque el filial del Cádiz lo tiene más que encarrilado. Si acaso podría tener sin cerrar el primer puesto en la penúltima jornada, aunque tiene siete de renta con el Ceuta.

A los albirrojos les está pasando factura la falta de definición en los últimos metros a pesar de que las oportunidades llegan. Entre la afición se ha creado ya cierta psicosis con los delanteros -Ito y Solferino-, aunque el cordobés estaba marcando antes de caer lesionado. La segunda línea compuesta por Iván, Tano, Albertito y Ayala podría tener la receta para poner fin a un atasco que convierte en una final el duelo del domingo con el Arcos (17:00).