Alemania busca sellar su pase a octavos de final de la Eurocopa, para lo que le bastaría el empate ante una Hungría que quiere dar la sorpresa Múnich, donde sólo le vale la victoria para superar la fase de grupos como uno de los mejores terceros.

El empate ante Francia les dio a los magiares un punto que estaba fuera de la mayor parte de los pronósticos y, de paso, les permitió mostrar que no deben ser subestimados por los rivales. Al conjunto germano, por su parte, le basta un punto, pero lo necesita. Una derrota, y una victoria o un empate de Portugal ante Francia en el otro partido del grupo de la muerte lo sacaría del torneo. Por eso, el choque, ante el rival que sobre el papel es el más débil del grupo, tiene que ser visto como una final en la que no habrá espacio para las especulaciones.

Es de esperar que Hungría tienda a encerrarse atrás y aguardar ocasiones de contragolpe, como lo hizo contra Francia. Alemania, por su parte, muy probablemente apostará por la ofensiva desde el comienzo, como mostró frente a Portugal.

En esa misión, el seleccionador Joachim Löw se enfrenta al problema de la probable baja de Thomas Müller, el líder del equipo en el último tercio del campo. Para suplirlo se barajan dos alternativas. Una sería la entrada al equipo de Leroy Sané, que jugaría por la banda derecha. La otra banda sería para Gnabry mientras que Havertz tendría que tratar de hacer las veces de Müller, aunque es claro que no tiene la ascendencia sobre los otros para asumir su liderazgo.

Otra variante podría ser que Goretzka jugara en la media punta. El jugador del Bayern está, según sus propias palabras, otra vez listo para jugar 90 minutos, tras haber reaparecido en la media hora final del duelo contra Portugal tras una larga lesión muscular.

Otros jugadores que habían estado tocados como Gündogan y Hummels estuvieron en el entrenamiento final, al igual que Kroos, que había faltado a la sesión anterior por una medida de regulación del esfuerzo.

La ausencia de Müller, en todo caso, sería un duro hándicap para Alemania debido a su importancia sobre el resto del equipo y a su papel de líder en el ataque. Löw, no obstante, esperará hasta último momento antes de descartarle y es posible que le reserve al menos un puesto en el banquillo.

El seleccionador de Hungría, Marco Rossi, dijo que su equipo puede ganar, aunque resaltó que para conseguirlo tiene que hacer un partido "casi perfecto". "Creemos que podemos lograrlo pero solo si tenemos la intensidad necesaria. Tenemos que hacer un partido casi perfecto", destacó.