Cómics

Camino sin fin, conejo errante

  • Nuevas y peligrosas aventuras aguardan al protagonista de este comic en su nueva etapa a todo color

Detalle de la ilustración de portada.

Detalle de la ilustración de portada.

¿Os gustaría conocer algunos secretos de las representaciones de marionetas niponas, el Bunraku? ¿Y cómo, en medio de una batalla entre ejércitos samuráis, un hecho muy concreto podía marcar la victoria de una u otra facción? ¿O un relato en el que se muestre con terrible crudeza la débil posición de la mujer japonesa frente a su marido?

Pues bien, tan solo un genio como Stan Sakai, que comenzó en el ya lejano año 1984 a narrarnos las peripecias de su personaje Usagi Yojimbo, tiene la habilidad de, en las diferentes historias incluidas en este volumen, sumergirnos de cabeza en la vida y costumbres del Japón feudal.

Su título es Bunraku y en la primera historia, el protagonista, junto al cazador de demonios Sasuke, con el que ya se ha enfrentado en más de una ocasión a seres infernales, deberá dar respuesta a unas extrañas muertes en las que las víctimas aparecen totalmente consumidas, ajadas, convertidas en secos cascarones.

Las pistas definitivas para averiguar el porqué de este misterio tal vez se encuentre en el escenario del espectáculo de marionetas que dirige el dueño del errante teatro, el ciego Takagi.

A lo largo de su casi eterno peregrinar, el conejo ronin ha conocido a muchos personajes, pero uno de los que le va a dejar más marcado es Lady Mura, una inteligente mujer que escribe con inmenso talento textos que han tenido mucho éxito entre sus lectores, narrando en ellos las aventuras de un gallardo samurái.

Lo malo es que su marido no está muy contento con el lugar en el que le ha tocado vivir, a la sombra de su pareja, por lo que ésta se aleja una temporada de él con la excusa de visitar a su padre.

Usagi disfrutará durante el camino de la lectura de los textos de Mura y las circunstancias harán que termine convirtiéndose en su guardaespaldas, pero lo que nunca pudo pensar el protagonista es lo oscuro del futuro de aquella mujer.

En 'Adachi', Usagi regresa al lugar donde dejó de ser un samurái para convertirse en un espadachín sin amo. Allí contempló la derrota del ejército de su señor, Lord Mifune, a manos de las huestes de Lord Hijiki.

Aunque, con la valentía que le caracteriza, el conejo pudo salvar la cabeza de Mifune, esconderla, y así evitar la humillación de su exhibición como trofeo de guerra.

Los fantasmas del pasado regresarán cuando Usagi se encuentre cara a cara con otro superviviente de aquella aciaga batalla, un traidor obsesionado con encontrar la oculta testa…

Y como colofón a este primer volumen, publicado en los Estados Unidos por la editorial IDW y que reúne las nuevas aventuras a todo color del personaje, que gracias a Tom Luth parecen salirse de las viñetas, un reencuentro.

Los veteranos lectores de esta longeva colección (contando éste, 34 volúmenes) ya conocéis de sobra a Gen, el rinoceronte cazarrecompensas que tantas y tantas aventuras ha vivido junto a Usagi, y que en esta ocasión se ha aliado con un tipo no demasiado fiable para recuperar unas valiosas espadas, devolverlas a su legítimo dueño y así cobrar una suculenta recompensa.

Pero claro, una cosa son los planes y otra la realidad. Sobre todo si en esta interviene otro personaje secundario muy conocido por los fans de Usagi, alguien que le tiene demasiado cariño a lo ajeno…

En fin, como siempre digo, esta serie nunca me cansa, siempre disfruto de su lectura y la recomiendo fervientemente para iniciar a los más jóvenes de la casa. Y a los mayores también, claro.

Y este nuevo volumen puede ser el perfecto punto de partida.

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