La imagen de María Santísima de la Luz ya está de nuevo en la parroquia de San Mateo. Unos 2.000 fieles y 363 caballos acompañaron a la imagen de la patrona de la ciudad y a la del patrón de la campiña, San Isidro Labrador, en su tradicional cabalgata agrícola de cada primer domingo de septiembre desde 1914. Un desfile que comenzó alrededor de las 16:30 y que se produjo sin incidentes reseñables, salvo el previsto corte de la carretera Nacional 340 al paso de la procesión para su entrada en la ciudad desde la dehesa de Caheruelas.

Los fieles a la Virgen de la Luz no quisieron perderse este año la bajada de la imagen al pueblo. De hecho, sigue siendo una cita marcada en el calendario para muchos devotos tanto de Tarifa como del resto del Campo de Gibraltar que nunca faltan a su cita en el santuario, y el camino hacia San Mateo. Muchos fueron los que se agolparon en el templo para continuar con la tradición que instauró el párroco Miguel Cantero y que desde 2010 es considerada Bien de Interés Turístico.

Las dos imágenes anduvieron a hombros en su esperado camino de luz hacia Tarifa, escoltados por diestros jinetes ataviados para la ocasión con traje corto. Pasadas las 18:30 de la tarde, llegaba el momento de alcanzar la carretera nacional, que permaneció cortada al tráfico en un par de kilómetros para facilitar el paso de los fieles. El concejal delegado de Seguridad Ciudadana, Juan José Medina, explicó que esperaban que este año las colas no fueran tan problemáticas como en años anteriores, ya que ayer sopló fuerte el viento de Levante, que hizo que muchos desecharan la idea de pasar la jornada en la costa tarifeña, por lo que el tráfico a la hora del cruce sería menor.

Poco después, la procesión entraba en el núcleo urbano y se hacía paso en la calle Batalla del Salado donde, como siempre, aguardaban las autoridades y la corte de honor para acompañar también a las veneradas imágenes, que ya ofrecían bellas estampas a su paso por el casco histórico del municipio. Una de ellas es el paso por la Puerta de Jerez, que ya cuenta con el restaurado Cristo de las Aguas, para caminar por la calle La Luz hasta llegar a San Mateo.

Allí, los jinetes rindieron su particular homenaje a la virgen. Al pasar por delante de la parroquia de San Mateo, los caballistas mostraron su respeto a la patrona del municipio y se quitaron el sombrero.

Juan José Medina indicó que este año se amplió el dispositivo sanitario para facilitar posibles evacuaciones y evitar situaciones como la ocurrida hace unos años, cuando hubo al menos tres heridos al ser arrollados por caballos. Afortunadamente, éste no ha sido el caso. Sin embargo, el Ayuntamiento de Tarifa contaba con dos ambulancias con conductor y personal sanitario que, en total, sumaban seis personas. También se dispuso un quad para facilitar posibles evacuaciones en lugares poco accesibles, donde las ambulancias no entren.

Está previsto que la imagen mariana de la Virgen de la Luz permanezca en la parroquia de San Mateo hasta el próximo domingo, 23 de septiembre, que será cuando inicie su camino de vuelta al santuario. Una jornada que seguro volverá a ser multitudinaria, y la patrona volverá a ser acompañada por miles de participantes en la tradicional romería.