El primer edil sanroqueño, Juan Carlos Ruiz Boix, se reunió ayer con las dos mujeres despedidas por Ociosur, la empresa que cuenta con adjudicación de la piscina municipal, para estudiar personalmente ambos casos y valorar las posibles soluciones.

El alcalde quiso conocer por voz de las dos afectadas sus argumentos y explicaciones y se comprometió a estudiar el pliego de condiciones por dicha empresa, para comprobar si se trata de un despido procedente o no, y a intentar conseguir su readmisión en sus respectivos puestos de trabajo, en el caso de que dicha medida fuese posible.

Las dos trabajadoras aseguran que sus despidos carecen de justificación alguna, ya que según sus criterios consideran que la empresa que regenta la piscina tiene unos resultados económicos positivos en su ejercicio. A lo que Ruiz Boix contestó que una vez conozca el estado de dichas cuentas, con los datos reales en la mano, podrá actuar de manera consecuente.