El secretario general del PP-A y cabeza de lista por Cádiz al Parlamento de Andalucía, Antonio Sanz, anunció este fin de semana en la localidad que su partido creará e impulsará un centro de alto rendimiento deportivo si Javier Arenas es elegido presidente de la Junta de Andalucía.

Sanz consideró que es fundamental aprovechar los potenciales de la ciudad en la práctica del surf, windsurf y kitesurf, "para desarrollar un proyecto doblemente beneficioso para el municipio, la comarca y la provincia".

El líder del PP de Cádiz explicó que el centro deportivo de alto rendimiento formará a deportistas de élite pero, además, será un reclamo turístico que incrementará los ingresos económicos de Tarifa. Así, como ejemplo de las posibilidades que ofrece la práctica deportiva, Sanz recordó el éxito cosechado por el primer campeonato mundial de kitesurf, organizado por un gobierno del PP en 2002.

Sanz enmarcó la propuesta en una batería de medidas incluidas en el programa de gobierno del PP de cara a las elecciones autonómicas del 9 de marzo. El candidato del PP anunció que los tarifeños tendrán 150 viviendas sociales más al año, frente a la inoperancia del PSOE en este sentido, y se beneficiarán de la ampliación de las especialidades médicas y las urgencias, así como de la ampliación de los consultorios médicos de Bolonia y Tahivilla.

Asimismo, se comprometió a acabar con el chabolismo educativo aún existente en la localidad y construir un nuevo instituto de educación secundaria.

Las grandes infraestructuras también formaron parte de su discurso, al que se sumó ayer el concejal del PP de Algeciras, José Ignacio Landaluce. Este último criticó que la labor socialista en sus ámbitos de gestión, incluido los ayuntamientos, ha dejado a la comarca en una posición de desventaja. Entre estos ejemplos citó el acceso a Algeciras por Los Pastores -donde se construyó una rotonda que, según Landaluce, no ha servido para nada- y la ausencia de iluminación en la autovía A-7 entre los términos municipales de Algeciras y San Roque. "Dejan a la administración a la altura del ridículo", concluyó.