Campo de Gibraltar

Jusapol incumplió las recomendaciones de seguridad de la Subdelegación

  • José Pacheco recuerda que la autorización a la concentración estaba expresamente condicionada "al respeto y no perturbación del tránsito peatonal ni de vehículos en la entrada a Gibraltar.”

Concentración de Jusapol, frente a la frontera, el pasado miércoles.

Concentración de Jusapol, frente a la frontera, el pasado miércoles. / e. s

El Subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Pacheco, recuerda que el derecho a manifestarse y concentrarse es “un derecho fundamental del que nos tenemos que sentir orgullosos. Es un derecho de todos y para todos, incluido en el artículo 21 de nuestra Constitución” en cuya redacción se reconoce el derecho de “reunión pacífica”. En los casos en los que la reunión se celebre en lugares de tránsito público debe comunicarse previamente a la autoridad, la cual “sólo podrá prohibirla cuando existan razones fundadas de alteración del orden público con peligro para personas y bienes.”

El subdelegado del Gobierno, a través de la Oficina de Coordinación de la AGE en el Campo de Gibraltar, comunicó a JUSAPOL su conformidad con la manifestación organizada en favor de la equiparación salarial de los diferentes Cuerpos y Fuerzas y Seguridad siempre y cuando se respetaran una serie de limitaciones recomendadas por un informe preceptivo de la Guardia Civil. “En vista de que se iba a celebrar un día festivo en las inmediaciones del puesto fronterizo con Gibraltar, se especificó claramente a los convocantes que no se podía perturbar el tránsito peatonal ni de vehículos“.

Pacheco lamenta cómo transcurrieron los hechos y “pedimos disculpas a todas aquellas personas que se vieron afectadas por los incidentes del pasado miércoles. No compartimos las formas que se utilizaron bajo el paraguas de un derecho fundamental y una causa legítima” como era el lema de la convocatoria. “Cualquier otro argumento utilizado ese día es responsabilidad de los que participaron en la manifestación.

”El subdelegado, no ha querido dejar pasar la ocasión de expresar que, dejando a un lado los asuntos de política nacional, “nuestro objetivo siempre será mantener unas buenas relaciones de vecindad y convivencia con los ciudadanos de Gibraltar. El que utilice un privilegio constitucional para alterar o reivindicar otras cosas, no lo hace con el consentimiento del Gobierno de España ni la aprobación de sus representantes.”

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