El acceso peatonal del puente que enlaza la autovía con la barriada de Miraflores presenta serias deficiencias. El deslizamiento del terreno ha provocado que el lugar presente un grave peligro para los viandantes, ya que cualquier distracción en el transcurso, sobre todo en el caso de las personas mayores, puede ser motivo de caída o accidente.

Asimismo, la erosión ha derivado en que la acera tenga una mayor altura, por lo que el problema se agrava. A la vez, la parte de abajo está cubierta de maleza y culmina en los quitamiedos de la autovía o de la salida de la barriada con dirección al municipio de Algeciras.

El paso es bastante transcurrido, ya que une la parada de autobús que tiene el Consorcio de Transportes del Campo de Gibraltar con el núcleo urbano, en este caso los medios que discurren con dirección San Roque o La Línea, por lo que son numerosas las personas que para realizar sus diligencias se trasladan a las distintas poblaciones colindantes, haciendo uso de este servicio.

Aunque el problema no se queda ahí, ya que desde la parada del autobús hasta la acera del puente las personas sólo pueden utilizar el arcén, sin una mínima acera que les permita evitar un posible riesgo.

Encima, la situación empeora ya que las vías tienen sus correspondientes quitamiedos, así que los usuarios del transporte público tienen que cruzar sin ningún paso peatonal y alzarse hasta poder atravesar el guardarraíl, lo que en el caso de las personas mayores puede ser un grave peligro.

De este modo, desde la parada de autobús existente con dirección a La Línea de la Concepción hasta la barriada sanroqueña sólo existe una acera, la del puente, y con el correspondiente deslizamiento de tierra.

Una vez se está a la altura del núcleo en paralelo con la vía de acceso desde el municipio de San Roque, sí se puede encontrar un paso peatonal, aunque todo el recorrido anterior queda pendiente de la inseguridad que cada día se hace más notoria entre los ciudadanos de la zona.