El nuevo hospital de La Línea ha puesto en marcha una moderna sala blanca en las dependencias de la Unidad de Gestión Clínica de Farmacia, destinada a la preparación de compuestos estériles y medicamentos biopeligrosos en las mejores condiciones de calidad y con mayor seguridad.

Estos espacios disponen de sistemas de filtración, climatización y estanqueidad para evitar que se produzca una contaminación de los preparados y garantizar su esterilidad. Además, la instalación eléctrica está ejecutada para garantizar la continuidad del servicio contando con suministro eléctrico alternativo para que entre en servicio en caso fallo del principal.

En esta unidad se atiende mensualmente a una media de 760 personas como pacientes externos, a los que se les dispensa en ese periodo una media de 1.300 tratamientos por ventanilla.

Durante el traslado del hospital antiguo al nuevo, la plantilla de la Unidad de Farmacia se ha reforzado con un contrato de un farmacéutico y con dos técnicos en Farmacia para garantizar una atención plena y de calidad a los pacientes durante la transición de la asistencia sanitaria de un centro al otro.

La sala elabora aproximadamente 900 de estas preparaciones al mes, entre quimioterapia, nutrición parenteral, colirios y demás mezclas estériles.