La Guardia Civil detuvo a una persona e incautó 2.280 kilos de hachís en una operación contra el narcotráfico. El instituto armado explicó en un comunicado que la operación comenzó en febrero, cuando descubrieron un local que era utilizado para ocultar vehículos robados que, posteriormente, eran manipulados para trasladar la droga procedentes de alijos.

En dicha operación intervinieron cinco vehículos, en uno de los cuales los agentes encontraron un revólver, dos pistolas automáticas del calibre 45, tres chalecos antibalas y 146 cartuchos. La Guardia Civil sospechó que la vivienda del local, ubicada en Guadiaro, había sido alquilada por otros narcotraficantes para esconder droga. Para verificar la sospecha, establecieron diversos operativos sobre la vivienda y en uno de ellos detectaron la llegada de un vehículo cargado de droga. Cuando los agentes entraron en el garaje, el conductor del vehículo, que estaba en marcha, aceleró intentando atropellar a los guardias civiles, que tuvieron que arrojarse detrás de unas puertas para evitar el atropello. El vehículo salió huyendo a gran velocidad y la persona que hacía la descarga fue detenida.