Los cuarenta clubes que competirán la próxima temporada en la Primera RFEF, la categoría de nuevo cuño que formará el tercer escalón del balompié nacional, están citados este jueves (11:30) en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas (Madrid) para conocer detalles de la nueva división, en la que militarán Real Balompédica Linense y Algeciras Club de Fútbol. La composición de los grupos y los ingresos por derechos televisivos, dos de los asuntos espinosos que están sobre la mesa.

La Primera RFEF da este jueves un paso más hacia su consolidación. La Española, que auspicia una competición que según unas fuentes arrancará el 15 de agosto y según otras a comienzo de septiembre, se cita con sus 40 participantes. Un segundo encuentro colectivo, ya que el 15 de abril se produjo una primera toma de contacto, entonces con los que ya tenían garantizada su plaza y con los aspirantes.

Uno de los grandes alicientes de la reunión es conocer la composición de los grupos. La Primera RFEF estará compuesta por dos de 20 equipos cada uno y su formación estará basada en criterios geográficos.

Existen numerosas propuestas sobre la mesa. En el caso de los dos representantes del Campo de Gibraltar, su esperanza es verse encuadrados junto a los otros cinco de Andalucía (Betis Deportivo, Linares, San Fernando, Atlético Sanluqueño y Sevilla Atlético), los dos de Extremadura (Badajoz y Extremadura de Almandralejo), los dos de Castilla La Mancha (Albacete y Talavera), el UCAM, único representante de la comunidad murciana, los cuatro clubes de la comunidad de Madrid (Castilla, DUX Internacional, Rayo Majadahonda y San Sebastián de los Reyes; los tres de la comunidad valenciana (Alcoyano, Villarreal B y Castellón) y el Atlético Baleares.

Además de ésta hay sectores que hablan de la posibilidad de que algeciristas y balonos compitan con equipos gallegos o catalanes.

La Primera RFEF aún tiene más aspectos a debate sobre la mesa y algunos especialmente importantes. Es el caso de la cesión de los derechos televisivos y los ingresos esperados de estos. En su día se habló de distribuir un 25% en audiencias, un 25% en clasificación y el 50% restante a partes iguales entre todos los participantes. El asunto quedó pendiente y apunta a concretarse más este jueves. 

Otra cuestión a tratar, impulsada por el sindicato de jugadores AFE es el convenio colectivo y la existencia, o no, de un salario mínimo como ya existe en las categorías profesionalizadas.

Uno de los asuntos más polémicos de la reunión del mes de abril fue el número de fichas sub-23 obligatorias en cada equipo, que la Federación fijó en ocho. Muchos clubes entienden que esta medida beneficia a los ocho equipos filiales.