La Real Balompédica regresa este domingo (15:30, en directo por Footters) al maltrecho Municipal de La Línea después del ciclón que ha propiciado su última derrota, a manos del Tamaraceite. Jugadores y técnicos se hacen fuertes para tratar de vencer, en un estadio al que no podrá acceder público, a un rival, el Cádiz B, diezmado en su arsenal y envuelto en una pésima racha. Lo que viene siendo un partido trampa de toda la vida, porque además a los de casa solo les vale el triunfo. Los locales tienen a todos los efectivos con los que cuenta su plantilla después de un convulso mercado de invierno. El recién llegado Loren e Iván Martín, que ya cuenta con su licencia, son los últimos en estar en disposición de ser alineados.

Escudriñar en la estadística antes de un partido con tanta tensión como el que que este domingo disputan Balona y Cádiz B brinda, como tantas veces, la oportunidad de hacer la lectura que uno prefiera. Los albinegros no encajan un gol en casa desde el cinco de enero de 2020 –obviamente eso quiere decir que no pierden desde entonces en el Municipal- pero en el presente curso solo han sido capaces de sacar adelante un duelo en estadio, fue en la quinta intentona, hace dos semanas frente al colista CD Marino.

Pero por encima de los números están las sensaciones y la realidad es que la Balona casi puede agradecer que debido a las restricciones impuestas por las autoridades sanitarias para frenar la expansión del Covid el partido se juegue a puerta cerrada.

Y es que nada más consumarse su derrota el pasado domingo en Tamaraceite parte de su hinchada [nunca es bueno confundir el todo con la parte] estalló a través de las redes sociales hasta tal punto que el presidente, Raffaele Pandalone, cansado de descalificaciones, anunció el miércoles su intención de abandonar el club al final del curso. Eso sí, fue rotundo a la hora de garantizar que la continuidad del técnico, Antonio Calderón, no depende del resultado ante el Cádiz B. Una defensa que nunca se sabe si es buena noticia.

En medio de tanta tensión,  casi seguro desmedida, la llegada de un canterano que vuelve a casa procedente del St. Joseph’s de Gibraltar, Loren, parece haber servido para apaciguar los ánimos. El extremo y el atacante Iván Martín, que ya dispone del tránsfer internacional llegado desde Polonia, se presentan como estrenos para este duelo. El capitán Sergio Rodríguez vuelve tras sanción y Mikel Fernández, que fue baja en Gran Canaria debido a unos problemas físicos es duda, aunque la realidad es que ya parece recuperado.

El preparador ha citado a toda la plantilla y es casi imposible adivinar un once. Desde repetir el trivote del último duelo en casa, hasta dar banquillazo a Luis Alcalde -que últimamente parece pedirlo a gritos- y jugar con dos nueves, todo entra dentro de la lógica. O al menos, de la especulación.

Calderón, que también ha recibido su ración de críticas a lo largo de la semana, emana una tranquilidad que casi con toda seguridad quiere contagiar a un vestuario que sabe que pintas bastos porque los objetivos se escapan.

El míster dijo del Cádiz B:  "Es un equipo bien trabajado, muy vertical, con experiencia como bloque y ya en la primera vuelta nos causó problemas aunque pudimos remontar".