La Real Balompédica Linense tiene por delante un mes decisivo en todos los apartados. En lo institucional porque el próximo viernes día 14 sus socios decidirán si la centenaria entidad albinegra inicia su conversión en Sociedad Anónima Deportiva (SAD), con todo lo que eso conlleva sea cual sea la decisión. Y en lo deportivo porque en los próximos cuatro compromisos el conjunto de Antonio Calderón, que se medirá a rivales de peso, desvelará con sus resultados, como poco, si sigue optando a la cuarta plaza o se tiene que contentar con mantener la posición, séptima en el grupo IV de la Segunda B,que le da derecho a disputar la próxima edición de la cada vez más atractiva Copa del Rey.

El presidente de la Balona, Raffaele Pandalone, expresó a comienzos de la presente semana, a través de su perfil de Twitter, su convencimiento de que a pesar de que su equipo está a siete puntos de la cuarta plaza y de que llegan después de tres marcadores negativos “todo puede pasar” en lo que resta de competición y de que los albinegros tienen por delante “quince finales”.

Tirso de Molina, en su obra El Burlador de Sevilla, ya puso en boca de Don Juan Tenorio aquello de “cuán largo me lo fiáis” y es que los albinegros, lejos de pensar en lo que resta de competición, deben atender ahora a cuatro encuentros nada fáciles para un conjunto que hilvana tres partidos sin celebrar un triunfo.

Los linenses se enfrentarán al Atlético Sanluqueño el domingo en La Línea (12:00) y a ese duelo seguirán dos desplazamientos consecutivos nada menos que Cartagena (líder) y Marbella (2º) y la visita al Municipal del Recreativo de Huelva (13º), envuelto en la pelea por la salvación.

En la primera vuelta, la Balompédica llegó colíder a la cuarta jornada (las que se han jugado hasta ahora de la segunda parte de la competición). Sumaba diez puntos y estaba invicta. Los enfrentamientos a sus próximos cuatro enemigos dejaron un paupérrimo balance de dos empates y dos derrotas y le descabalgaron de la zona noble.

El primero de esos compromisos, con el Atleti, precisa de un triunfo porque una victoria de los de la venencia y la manzanilla auparía a estos a la pelea por la séptima plaza. Es decir, un rival más para el segundo objetivo, el de la Copa.

Después le toca viajar a Cartagena (una sola derrota en casa) y Marbella (invicto en su estadio) y cierra el ciclo un Recreativo de Huelva en permanente crisis, pero con capacidad para dar la sorpresa en cualquier escenario. Y cada vez está más acuciado por su necesidad de sumar puntos.