Accidente aéreo

La investigación apunta a que el avión sufrió un fallo múltiple

  • Uno de los heridos dijo en el hospital que hubo una avería múltiple en los motores del A400M.

Los primeros datos de la investigación apuntan a un fallo técnico masivo en los motores del Airbus A400M que se estrelló el pasado sábado en las inmediaciones del Aeropuerto de San Pablo. Así lo habría declarado en el hospital uno de los dos supervivientes del accidente a los investigadores. Según esta versión, publicada por la web del semanario alemán Der Spiegel, varios motores del A400M habrían fallado poco después del despegue, lo que habría obligado al piloto a intentar dar la vuelta para tomar tierra en el Aeropuerto de San Pablo. Al ver que no podía mantenerse en el aire y no le daba tiempo a llegar al aeródromo, intentó un aterrizaje de emergencia en un campo cercano, pero chocó contra unos cables de la luz y una torre de alta tensión. Este impacto hizo que el avión cayera y se incendiara. 

Falta por conocer cuál fue la causa de la avería múltiple de los motores. Los fallos de motor han sido una constante en el proceso del A400M y causaron un retraso importante del proyecto. El sistema de propulsión del A400M fue el mayor escollo del programa del avión militar. Ideado por el consorcio EPI (integrado por el británico Rolls Royce, el francés Snecma, el alemán MTU y el español ITP), fue la causa de todos y cada uno de los retrasos. Los problemas en la concepción del motor TP400 fueron los mayores responsables de estas demoras en el programa. 

El grupo tampoco logró en un principio poner en marcha el programa informático de regulación de las hélices de un motor que debe generar 11.000 caballos, una potencia nunca lograda por un turbopropulsor occidental hasta entonces. Otro problema que ha lastrado el proyecto ha sido el sobrepeso del avión. 

La comisión mixta de técnicos de los ministerios de Fomento y de Defensa que investiga el accidente se centra ahora en averiguar el motivo por el que los motores fallaron. El piloto envió un mensaje de alerta a la torre de control nada más despegar y se analizan ahora los registradores de voz del avión para tratar de encontrar la explicación del fallo múltiple. La aeronave realizaba su primer vuelo de producción antes de que fuera entregada el próximo mes al Ejército de Turquía, que ya había adquirido otros dos A400M antes. 

Por su parte, el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil ya ha cerrado el atestado del accidente y se lo remitió durante la mañana de ayer a la juez de Instrucción número 13 de Sevilla, Ana Rosa Curra, que se ha hecho cargo de la investigación del caso. El instituto armado, al tiempo que ha entregado el atestado, ha solicitado a la juez que decrete el secreto de sumario sobre las actuaciones. Por el momento, la instructora no ha tomado todavía una decisión al respecto.

La identificación por ADN tardará al menos 72 horas

El cotejo del ADN de los restos mortales de los cuatro fallecidos en el accidente del Airbus A400M con los de sus familiares se demorará como mínimo 72 horas, según señalaron ayer a Efe fuentes de la investigación. Los restos de los cuatro fallecidos están en las instalaciones del Instituto de Medicina Legal de Sevilla, cuyos profesionales han extraído muestras de ADN. De forma complementaria, profesionales sanitarios han tomado muestras del perfil genético a los familiares de los cuatro fallecidos para contrastarlas con las de los fallecidos. Ambas muestras se han remitido al Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil de Madrid, donde los expertos del instituto armado determinarán la identidad de cada uno de los fallecidos: los pilotos Manuel Regueiro y Jaime de Gandarillas y los ingenieros Gabriel García Prieto y Jesualdo Martínez. El análisis de los resultados de las pruebas podría demorarse al menos 72 horas más, tras lo cual los familiares decidirán, junto a la empresa, si celebran un funeral conjunto o separado, así como el lugar en el que se lleve a cabo el sepelio de las víctimas. El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, oficiará esta tarde un funeral por las cuatro víctimas mortales en la Catedral, pero en él no podrán estar los cadáveres. El presidente de Airbus Defense and Space, Bernhard Gerwert, y el consejero delegado del grupo Airbus, Thomas Enders, se reunieron con los familiares de los muertos tras el siniestro. Los parientes siguen estando asistidos por psicólogos y especialistas que les ayuden a superar el trauma sufrido tras las muertes de sus familiares en el accidente ocurrido el pasado sábado.

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