Los más de 300 empleados del Ayuntamiento de Barbate (Cádiz) decidieron ayer prorrogar una jornada más la asamblea permanente, con lo que son ya tres días los que mantienen paralizados por completo los servicios municipales. La razón de su protesta: la "desesperación" que sienten porque desde el pasado mes de julio no cobran sus nóminas.

El alcalde de la localidad, el socialista Rafael Quirós, se reunió con los representantes de los trabajadores para informarles de las gestiones que hace tiempo vienen realizando infructuosamente ante distintas administraciones, para solucionar el problema. En esa reunión, el alcalde sostuvo que Barbate está "en una situación de emergencia" que le ha llevado a tener incluso que "cortar las ayudas sociales". "Nuestro Ayuntamiento está en la ruina, nos sentimos abandonados, y esto no lo podemos seguir permitiendo", dijo Quirós, tras explicar que se siente "defraudado» por las administraciones y que se han sentido tratados como "leprosos".

Aparte de justificaciones del alcalde, los representantes de los trabajadores no sacaron nada más, ni siquiera esperanza de que el Ayuntamiento pueda encontrar fondos para pagar sus nóminas, por lo que decidieron prorrogar hasta hoy la asamblea permanente que iniciaron el lunes. No es la primera vez que lo hacen, el pasado 26 de octubre también bloquearon los servicios municipales porque "no queda otra", argumentó José Manuel Torres, delegado de la FSP-UGT y presidente de la junta de personal del Ayuntamiento de Barbate.