El alcalde de Córdoba asume que al Festival de la Guitarra hay que "darle una vuelta"

El alcalde de Córdoba, José María Belllido, ha asumido este viernes la necesidad de abrir una "reflexión" sobre el Festival de la Guitarra tras los discretos resultados obtenidos el pasado mes de julio, con muchos de los conciertos organizados por debajo del aforo esperado. Durante un desayuno coloquio sobre Ciudades y cultura organizado por El Día de Córdoba y Acciona en el hotel Hospes Palacio del Bailío, el primer edil ha apostado por "darle una vuelta" al principal acto cultural organizado en el verano cordobés, pues "corre el riesgo de perder importancia respecto a los festivales del entorno".

Bellido ha invitado a reflexionar en general "en torno al mundo de la música" en la ciudad, pues ha recalcado que Córdoba disfruta de "muchos meses de buen tiempo", lo que permite organizar grandes conciertos al aire libre durante gran parte del año. Y ha recordado que él mismo intentó poner en marcha una nueva fórmula para el Festival de la Guitarra, con la externalización de la gestión, pero "la sociedad en general" lo rechazó con el voto en contra del Pleno municipal.

Más allá de la música, el primer edil ha avanzado que durante el actual mandato se dará un impulso a la pintura y al teatro, con el objetivo de crear "un certamen de mayor calidad". En cuanto a la pintura, Córdoba se encuentra inmersa en la celebración del 150 aniversario del nacimiento de Julio Romero de Torres, una ocasión para la que se han organizado multitud de actividades.

Junto a esto, José María Bellido ha explicado que el Ayuntamiento ha recuperado un formato que "se había abandonado", el de las grandes exposiciones culturales. La próxima se centrará en la Corduba romana, que se basará en la última publicación del catedrático de Arqueología de la Universidad de Córdoba Desiderio Vaquerizo. El alcalde ha dicho que se habían barajado otras muestras centradas en el legado judío y en el islámico, pero la administración local ha optado por dejarlas aparcadas debido a que los últimos acontecimientos internacionales "podían llevar a malinterpretar cualquier intervención".