Elecciones en Andalucía 2018

Juan Marín no volverá a hacer presidenta a Susana Díaz

  • El candidato de Ciudadanos se compromete a no prestar los votos naranjas para permitir un Gobierno del PSOE

Juan Marín, en un encuentro con militantes en Sevilla

Juan Marín, en un encuentro con militantes en Sevilla

Ciudadanos no volverá a apoyar un gobierno socialista en al frente de la Junta de Andalucía. Sólo dos días después de la convocatoria de elecciones en Andalucía para el 2 de diciembre, Juan Marín ha roto la baraja. El que ha sido socio indispensable para Susana Díaz en esta legislatura no repetirá su papel.

Es a lo que se ha comprometido el candidato naranja durante un encuentro con militantes en Sevilla, donde ha asegurado que su intención es ganar las elecciones. De esta manera ha rechazado también los llamamientos de Juanma Moreno a formar una mayoría de centroderecha con el líder popular al frente. 

Juan Marín sabe que su partido es el único con expectativas de crecer de forma importante en las elecciones del próximo 2 de diciembre. Parte de nueve escaños y cuenta con el desgaste de casi cuatro décadas de gobiernos socialistas y de un PP golpeado por la moción de censura y unas primarias más duras de lo esperado. 

Ante un escenario de pocos cambios, la incertidumbre después del 2-D está en lo que hará Juan Marín con los escaños que logre. Tendrá la ayuda de Albert Rivera e Inés Arrimadas en campaña, pero la dirección estatal naranja ya deslizó ayer, a través de Fernando de Páramo, que iba a ser dificil reeditar un pacto de investidura como el de 2015. 

El candidato de Ciudadanos a la Presidencia de la Junta dice tener "más ganas e ilusión" que en la anterior campaña electoral andaluza. Marín ha recordado, como hace siempre que puede, que su partido cumple con lo que firma y con lo que dice. Y justo después de criticar la "falta de palabra" de la presidenta de la Junta se ha comprometido a no volver a prestar sus votos a que Susana Díaz vuelva a San Telmo en 2019.

Marín se inspira en Inés Arrimadas

Marín se mira en su compañera en Cataluña. Su intención es emular la sorpresa que dio Inés Arrimadas, pero en un parlamento sin los vetos del catalán. Y su discurso es el de la regeneración democrática, por eso se ha acordado de la ruptura del pacto de investidura, el pasado 4 de septiembre. 

Sobre políticas, nada nuevo. Eliminación de los aforamientos, cambio en la ley electoral, ley de evaluación de políticas públicas y oficina antifraude. Todas esas propuestas estaban en el acuerdo que ha sostenido la X Legislatura. Marín quiere que vuelvan en la XI y que sea él quien los ponga en marcha. 

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