Para la Federación Andaluza de Sindicatos de Enseñanza la salud de los docentes es lo primero. Con el lema “pan para hoy y privatización para mañana”, el sector pide una serie de medidas y más seguridad laboral para proteger a su profesorado y ha anunciado una huelga para el 9 y el 15 de octubre.

Esta convocatoria es la segunda de este tipo que realiza el sindicato CGT después de la que tuvo lugar el pasado 18 de septiembre, coincidiendo con el inicio de curso, con el objetivo de exigir al consejero de Educación, Javier Imbroda, un “refuerzo real” de las plantillas de los profesores para hacer frente a la situación excepcional que se vive con la pandemia del Covid-19.

Esta reclamación se une a otras como la de dotación de EPI y pruebas PCR, la ampliación del personal docente y de soporte, la sustitución de los trabajadores vulnerables, la presencia de personal sanitario en los centros, el incremento de las dotaciones de limpieza e higiene de los espacios y el permiso retribuido para aquellos trabajadores que tengan hijos en cuarentena o que hayan dado positivo.

Esta nueva huelga se ha decidido llevar a cabo como “medida de presión”, y se ha invitado a participar a todas las organizaciones sindicales, sindicatos de estudiantes y otros colectivos para que “se unan en una lucha que afecta a toda la ciudadanía”.

Con estas dos nuevas jornadas de huelga, el sector de la educación reivindicará la necesidad de garantizar las medidas higiénico-sanitarias básicas con materiales y personal sanitario necesario para que la vuelta alos centros educativos sea lo más segura posible.

"Ya son más de 1.500 docentes positivos por Covid-19 y las medidas que hasta ahora se han aprobado no son suficientes e incluso se sienten engañados y defraudados por el Gobierno" según CGT.  El sindicato cree que Javier Imbroda, Consejero de Educación, y los sindicatos firmantes, "venden humo" y, para ellos, no es ningún logro conseguir “reducir” las ratios a 20 en Infantil, 25 en Primaria y 30 en Secundaria cuando es lo que marca la ley.

"Si el aumento de personal docente no viene acompañado por una bajada de ratios real y efectiva por debajo de lo que actualmente marca la ley, permitiendo la distancia de seguridad, no dejará de ser un parche temporal por mucho que se quiera vender de otra manera" concluye el sindicato.