Andalucía dispone de un paisaje muy difícil de igualar. Aparte de su gran extensión y la belleza tanto de su interior como de su costa, la comunidad cuenta con espectaculares piscinas naturales si queremos huir de la masificación propia de las vacaciones. No en vano, Andalucía dispone de 24 parques naturales, los cuales carecen de casi explotación humana y cuentan con variadas fauna y ecosistemas.

El blog GodoPools ha realizado una selección de las 10 piscinas naturales que es de obligatoria visita si queremos escapar del ruido y las aglomeraciones durante las vacaciones. 

El Chorro - Málaga

Dentro del municipio de Álora, la visita a esta piscina natural supone una doble combinación de experiencias. Por un lado, se encuentra situado justo al lado del tan conocido Caminito del Rey. Por otro, podremos disfrutar en un enclave paradisíaco de actividades como la vale o el piragüismo.

Embalse de Iznájar - Córdoba

Este embalse es el más grande de la comunidad andaluza y sus aguas proceden del río Genil. Se trata de un lugar muy turístico durante los meses de verano dada la disposición de sus aguas que lo convierten en una auténtica playa de interior. Pueden practicarse deportes acuáticos o rutas de senderismo así como pasar un día alejado de las aglomeraciones.

Cueva del Gato - Málaga

Dentro del Parque Natural Sierra de Grazalema nos encontramos con la Cueva del Gato, uno de los paisajes naturales más reconocidos de Andalucía. Además, es un espacio protegido debido a sus formaciones geológicas y sus pinturas rupestres, lo que le otorgaron la categoría de Patrimonio Histórico de España. 

Julio es una de épocas preferidas por los bañistas dadas las aguas cristalinas de las que dispone. Aún así, la temperatura suele ser muy baja durante todo el año. 

Poza de Los Patos - Málaga

Viajamos de nuestro a la provincia malagueña, en concreto al Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Aljama. Sus aguas proceden del Río Chillar y para llegar a este enclave debemos realizar antes una ruta de senderismo de 6 kilómetros siguiendo el curso de este río. 

Balsa de Cela - Almería

Optamos por la provincia almeriense para encontrarnos este manantial de agua termales con una altura de 720 metros sobre el nivel del mar. Además, este manantial posee unas aguas únicas, dadas las propiedades medicinales que poseen para aliviar una gran variedad de enfermedades. Por si fuera poco, su temperatura se mantiene entre los 22 y los 24 años durante todo el año.

Embalse de los Bermejales - Granada

En el curso del río Cacín, dentro del municipio Arena del Rey, se encuentra este embalse a tan solo 49 kilómetros de la capital granadina. Sus aguas cristalinas y su fauna invitan al baño y a la práctica de deportes si queremos huir del ruido urbano.

Arroyomolinos La Playita - Cádiz

En el norte de la provincia gaditana, justo en Zahara de la Sierra, descubrimos una de las playas artificiales más populares del paisaje andaluz. Si queremos emociones fuertes, además de poder disfrutar de un baño reparador, también podemos optar por la tirolina de 136 metros que recorre todo el lugar.

San Nicolás - Sevilla

A 93 kilómetros de Sevilla encontramos esta playa artificial. En un enclave rodeado de gran belleza, sus aguas proceden del Arroyo de los Parrales. Dispone de merenderos y está totalmente adaptado para sus visitantes. 

La Poza de los Huevos - Málaga

Málaga cuenta con auténticos paisajes de ensueño. Uno de ellos se encuentra en Mijas, La Poza de los Huevos, una piscina natural cuyas aguas poseen manganeso en gran cantidad, por lo que los bañistas acuden para tratar enfermedades o problemas como el asma. 

Baños de la Hedionda - Málaga

Para culminar esta lista no podía faltar otro lugar de la provincia de Málaga. En esta ocasión hablamos de los baños de la Hedionda, un enclave vigente desde la época romana. Sus aguas sulfurosas también cuentan con características curativas y su temperatura se mantiene durante todo el año en los 18 grados.