La pasada semana se dio a conocer que un ex trabajador había denunciado a Algesa al ser despedido tras ser subrogado de CTM. El Ayuntamiento de Algeciras remitió un comunicado sobre los motivos que habían llevado al despido de este empleado y el despedido y su familia responden a las afirmaciones vertidas en ese escrito.

"Nos han sorprendido sobremanera las falsedades e ilegalidades que se mencionan en el comunicado del Ayuntamiento. En ellas, el teniente de alcalde y diputado por la Diputación de Cádiz, Javier Rodríguez Ros vuelve a ensañarse con el trabajador discapacitado.

Primeramente el teniente de alcalde de Movilidad alega motivos económicos, cuando realmente los costes laborales de dicho trabajador son negativos. Una vez abonadas todas las nóminas del trabajador despedido, a Algesa le sobran más de 4.000€.

Por otra parte se desconoce el proceso de selección y salario del informático de Algesa que ha tomado temporalmente sus funciones (esta situación de opacidad y falsa duplicidad se encuentra en este momento investigada por la UDEV tras denunciarse el este jueves 15 de septiembre en la Policía Nacional).

Nos ha creado gran sorpresa la facilidad con la que ha difundido datos médicos privados y personales a la prensa, saltándose sin ningún pudor la Ley orgánica de protección de datos. Hechos por los cuales será denunciado.

El trabajador recibió una carta de despido en la que exclusivamente se alegaba una duplicidad por el puesto de informático. Si el Ayuntamiento está alegando en su comunicado criterios económicos, organizativos o de cualquier otra cuestión, estaría pues autoinculpádose de falsear un despido.

La información difundida en prensa por el Ayuntamiento de Algeciras a través del concejal de movilidad Rodriguez Ros es absolutamente falsa.

La baja no es fruto de capricho. El trabajador cursó baja tras un accidente de tráfico en el que salvó la vida de milagro y se rompió la columna vertebral por 3 sitios, teniendo que ser intervenido en el hospital Puerta del Mar, donde se le colocaron 10 tornillos y 2 barras de titanio. Y queremos señalar especialmente que el alta nunca fue voluntaria, fue un alta de oficio que solamente la podía dar el INSS, nunca el propio trabajador, y es fácil de demostrar.

Tal como fue recibida el alta médica del INSS el 7 de julio el trabajador acudió a incorporarse. Pero se le obligó a tomar un mes de vacaciones sin poder negarse. Y tras acudir de nuevo al centro de trabajo lo mandaron a casa 2 días sueltos.

Finalmente, cuando por fin creyó que iba a retomar sus funciones, sorpresivamente le ponen delante otra hoja de vacaciones, a lo que puso objeciones ya que quería reincorporarse y solicitó hablar con el propio gerente al que encontró en compañía del antes mencionado informático. Nuevamente, sin opción se le obliga a tomar 32 días de vacaciones.

El concejal afirma que fueron 70 días, lo que es otra mentira, y cada vez que acudía al centro para reincorporarse tenía que esperar largas horas.

Durante estos 7 años se ha limitado a trabajar con enorme dedicación y profesionalidad, absorbiendo un altísimo volumen de trabajo y tareas de alta responsabilidad. Siempre mirando por mejorar el servicio público de transportes y por sus compañeros. Con la congratulación siempre de la intervención municipal, que sabían de su buen hacer y depositaron toda su confianza en él".