María Luisa Rondón, cantante del pasodoble de Algeciras, ha descubierto este jueves una placa en la calle Muro, cerca de la casa en la que nació, lugar que hoy ocupa el restaurante La carbonería.

Arropada por amigos y familiares y buen parte de la corporación municipal, con el alcalde, José Ignacio Landaluce, a la cabeza, María Luisa Rondón, ha agradecido a la asistencia de los presentes. "Juana Cid, que junto al alcalde ha movido todo esto, a mis amigos y familiares y a mis nietos, que creía que tenían actividades", ha reconocido.

En el acto, Rondón se ha arrancado a capela con el pasodoble de Algeciras, Bello tesoro de España. También es la voz de Rincón Andaluz, también convertido himno de la ciudad. 

Landaluce ha indicado que “hoy cumplimos con la promesa que le hicimos en su día a María Luisa y a su familia, y que no hemos podido llevar a cabo antes a causa de la pandemia. Algeciras salda hoy una parte de su deuda de gratitud con una de sus grandes artistas, que desde siempre ha sido una de las voces más señeras de esta tierra”.

Muy implicada con sus tradiciones, especialmente con la Semana Santa, fue pregonera del Carnaval Especial en 1990 y de la Feria Real en el año 2015 junto a Juana Mari Moreno, Ana María Espínola, Beatriz Calderón y Maite Moreno. Además, suele participar activamente en Algeciras Entremares. 

María Luisa Rondón, que nació en el número 23 del Callejón del Muro, comenzó a destacar como cantante desde muy pequeña y con siete años ya actuaba en Radio Algeciras-EAJ-55. A los 10 años su tía se la llevó a Madrid, donde la escucharon representantes de la discográfica Phillips. Allí recibió clases del maestro Quiroga durante tres años. Sin embargo, en unas vacaciones en Algeciras conoció a Joaquín González, que acabó siendo su marido, y ya no regresó a la capital.

Sin embargo, nunca dejó de cantar y en Algeciras participó en todo festival benéfico que se preciara: para Navidad con Amor, para el comedor del Carmen cuando el padre Flores y después cuando el padre Cruceyra.