historia del puerto de algeciras (LXXIX)

Relleno de la Dársena y construcción de la carretera de la Isla Verde (1953-1958)

  • Historia. El incremento de las barcas propiedad de particulares reclamaba, después de la Guerra Civil, la habilitación de una dársena más amplia para cobijar a estas embarcaciones

La construcción, entre los años 1913 y 1916, del muelle de Villanueva en el flanco norte del recién iniciado muelle de la Galera, habilitó una superficie de aguas abrigadas, junto a la Marina, denominada dársena de Villanueva, donde se resguardaron, a partir de la segunda de las fechas señaladas, los faluchos, barcas de pesca y material flotante que la Junta de Obras utilizaba en las obras del muelle de la Galera y, posteriormente, del Rompeolas de la Isla Verde (chalanas, aljibes, botes auxiliares con máquina de buzo, etc…), así como las embarcaciones de la Comandancia de Marina, de Sanidad Exterior y de los Prácticos.

El incremento de las barcas propiedad de particulares dedicadas a la actividad pesquera y de los barcos contrabandistas requisados, reclamaba, después de la Guerra Civil, la habilitación de una dársena más amplia para cobijar a estas embarcaciones, motivo por el cual la Junta decidió construir otra con mayor capacidad de atraques en la ribera sur de la desembocadura del río de la Miel, a la que ya se ha hecho referencia. Como recoge el proyecto de Relleno de la dársena de Villanueva, "la reciente terminación del acceso al puerto desde la carretera general (lo que luego sería conocido como Paseo Marítimo) adolece del grave defecto de que se estrangula precisamente a la entrada en la Marina, problema que se solventaría ampliando la citada Marina, obra que exigía el relleno parcial de la dársena de Villanueva". (Esta obra portuaria se añadía a las de urbanización de la zona ya emprendidas por el Ayuntamiento, como eran la demolición de la antigua Pescadería y el acceso desde la Plaza Alta hasta el Paseo Marítimo, consistente en la emblemática Escalinata, hoy desaparecida).

En el mismo proyecto se proponía el relleno total de la dársena de Villanueva cuando se hubiera concluido la prolongación del muelle Pesquero. La propuesta del ingeniero director fue aprobada en sesión plenaria de la Junta el 14 de noviembre de 1952, elevándose a la superioridad y proponiéndose su ejecución por el sistema de administración con un presupuesto de 869.444,97 pesetas. El proyecto fue aprobado técnicamente por Orden Ministerial de fecha 26 de febrero de 1953, autorizándose la subasta de las obras por Orden Ministerial del 9 de septiembre del mismo año. Las obras se adjudicaron a la empresa Obras y Servicios por un importe de 977.745,74 pesetas por Orden Ministerial de fecha 24 de marzo de 1954.

La liquidación de las obras aparece recogida en la sesión ordinaria celebrada el 27 de agosto de 1958, aunque los trabajos del relleno de la parte más cercana a la Marina de la dársena debieron estar finalizados a finales del año anterior.

Construcción de la carretera de la Isla Verde (1953-1958)

Como ya se ha referido, el puente de la Isla Verde, que se construyó entre 1925 y 1926 para que pudieran acceder los trenes con las vagonetas cargadas de piedra de la cantera hasta las obras de construcción del Rompeolas, se hallaba muy deteriorado en el año 1949, no siendo ya de utilidad para las dependencias y servicios existentes en la isla (varadero, central eléctrica, muelle del Dique Norte, taller de mecánica, taller de carpintería de ribera, faro, etc…), todas ellas mal explotadas por su falta de comunicación con tierra. Estas circunstancias, además de la necesidad de prolongar el Dique Norte para habilitar nuevas líneas de atraque y posibilitar la instalación en la isla de almacenes de combustibles líquidos, hacían necesario sustituir el desvencijado puente por un dique de escollera sobre el que construir una calzada que enlazara las dependencias antes descritas con las demás instalaciones portuarias y permitiera el acceso de camiones.

En el proyecto redactado por el director accidental, Antonio Abril Solís, se barajaba la posibilidad de dejar un tramo sin rellenar, con un puente levadizo o giratorio, para que no se cerrara completamente la comunicación marítima entre el varadero de la Isla Verde, la dársena del Saladillo y el muelle de la Galera, aunque cuando se acometieron las obras no se dejó ningún tramo sin rellenar.

Las obras que se proyectaban -un dique de 6,20 metros de anchura- se llevarían a cabo por el sistema de administración con un presupuesto de 1.092.770,92 pesetas. Sin embargo, una serie de circunstancias, como el interés mostrado por la Empresa Nacional Elcano de emplazar un muelle para el uso de transbordadores de los llamados ferry-boats, con vista a la comunicación ferroviaria de España con el Norte de África a través del puerto de Algeciras y la elección de los entornos de la isla para dicho emplazamiento, obligaron a abandonar el proyecto de escollera en sustitución del puente para englobarlo en un nuevo y más ambicioso proyecto que se denominó Acceso a la Isla Verde y al muelle de pasajeros y automóviles, redactado por el ingeniero director Pedro Gaytán de Ayala e Ibero el 14 de julio de 1950.

Las obras que ahora se proponían consistían en la construcción de una superficie de rellenos, con una anchura de, aproximadamente 25 metros, que se extendería entre la playa del Chorruelo, donde se iniciaba el antiguo puente, y el viejo taller de bloques de la Isla Verde. Con el citado relleno se habilitaría una calzada para vehículos motorizados de 12 metros de anchura, además de espacios para una doble vía de ferrocarril, aceras para peatones y servidumbre de agua, energía eléctrica, teléfono y alumbrado.

En este nuevo proyecto se desechaba la idea de conservar un paso marítimo con puente levadizo, procediéndose a construir la calzada continua sin dejar comunicación por mar entre las dársenas del Saladillo y de la Galera. El presupuesto de ejecución por administración ascendía a 18.030.633,65 pesetas y el de contrata, que fue el sistema propuesto, a 20.481.399,39 pesetas, aunque fue reformado e informado el 8 de mayo de 1952 para incluir el proyecto de muelle para pasajeros y automóviles -que luego sería conocido como muelle de la Peseta- y nueva estación marítima. La carretera de acceso a la Isla Verde y al nunca acabado muelle de pasajeros y automóviles estuvo finalizada en el año 1954, aunque se continuaron realizando trabajos complementarios de mejora hasta bien entrado el año 1957.

Antonio Torremocha. Doctor en Historia Medieval. Académico de número de la Academia Andaluza. Director del Museo de Algeciras (1995-2007)

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