De la idiosincracia de Algeciras a su singularidad especial. Por sorpresa y sin cortar ningún lazo a causa de las restricciones establecidas en periodo electoral, el nuevo Museo Municipal abrió ayer sus puertas en la calle Teniente Miranda tras un proyecto de reconversión de la antigua Casa de la Cultura que dio sus primeros pasos a mediados de 2013. Un 70% de los fondos están expuestos, destacando la puesta en valor, por primera vez, de la Algeciras romana con una sala denominada Iulia Traducta. Entre las piezas más valoradas está un anillo de bronce de la Protohistoria y dos obras del tarifeño Guillermo Pérez Villalta.

Unas jornadas de puertas abiertas -que hoy tienen continuidad- en el marco del Día Internacional de los Archivos fue la excusa para la visita girada ayer por el alcalde, José Ignacio Landaluce, junto a la concejal de Cultura, Pilar Pintor. Se había especulado mucho en los últimos meses sobre la fecha de apertura y el propio primer edil anunció ayer que la inauguración tendrá lugar el próximo mes de julio. No obstante para los que quieran visitar el nuevo museo permanecerá ya abierto en horario de mañana (10:00 a 14:00) de lunes a sábado, así como en horario de tarde (18:00 a 20:00) de lunes a viernes.

La comitiva de visitantes estuvo formada por algecireños singulares como Pepe de Lucía; artistas plásticos como Antonio López Canales; el cronista oficial Luis Alberto del Castillo; el cónsul de Marruecos, Abdelfatah Lebbar; representantes de las universidades de Cádiz y Huelva; así como colectivos sociales, culturales, patrimoniales, vecinales y comerciales. Destacó la ausencia de la oposición, salvo del concejal de C's, Ignacio Holgado.

La concejal de Cultura, Pilar Pintor, fue la encargada de guiar el itinerario por las diferentes áreas arrancando en la antesala de la Prehistoria con un vídeo que proyecta las tradiciones de la ciudad, desde su folclore a las fiestas pasando por el genio Paco de Lucía.

En la planta baja se ubica la sala de Prehistoria, Iulia Traducta, lozas y azulejos y la sala de Etnografía. En la primera planta se sitúa la sala Medievo, Tiempo Oscuro, la Edad Contemporánea, Arte Sacro, la sala de exposiciones temporales, Bellas Artes e historia del edificio. El proyecto ha supuesto una inversión de unos 180.000 euros, financiados por Fondos Europeos y la Diputación Provincial.

Pintor se paró en las piezas más importantes como el pilar de la Diosa Diana, el candil califal o el famoso casco medieval. Es un edificio moderno sabiendo conjugar la singularidad de las piezas exclusivas de Algeciras. Se ha buscado que sea lo más didáctico posible frente al concepto de "museo antiguo" de muchas más piezas sin una lectura tan fácil como la actual. Ahora es un espacio más vivo que permitirá variar la colección permanente. La museografía se adapta además a la puesta en valor del edificio. En la parte inferior se incluye una sala multiusos para presentaciones.

El museo va estar en constante movimiento y eso potencia el valor del mismo por las piezas que se mantienen en los fondos. "El museo no es sólo la exposición permanente, sino también lo guardado". De hecho además de una biblioteca hay un almacén de Bellas Artes, que son apuntes novedosos con respecto al antiguo emplazamiento. De cara a la futura inauguración del museo se pondrá en circulación unos folletos, al igual que una futura web acorde a la imagen del portal municipal.

Como apunte de las piezas más destacadas, de la etapa romana se pone en relieve un anillo de bronce (Protohistoria) en depósito de la familia Ortiz; el pedestal de la Diosa Diana; las ánforas halladas en El Rinconcillo exclusivas y de pieza entera; el candil califal único del siglo X; el casco medieval de guerrero; o la colección de artes plásticas.

El alcalde culminó el recorrido con unas palabras dirigidas recordando que de un pequeño espacio se ha pasado a un edificio de dos plantas libre de barreras arquitectónicas, un espacio interactivo y didáctico donde los "algecireños puedan encontrarse a sí mismos" enmarcado en un gran proyecto, que es el Barrio de la Caridad, dijo Landaluce. De hecho, las dos últimas estancias corresponden a cómo vivían los ciudadanos de la época con una sala Especial, como broche final con fotos aportadas por vecinos y un chaparro del que cuelgan cuerdas con pequeños papeles para aportar sugerencias o una valoración de la visita.

Prehistoria

Algeciras toma protagonismo. La primera sala culmina en la Protohistoria, abarcando desde el Paleolítico hasta la época púnica. Lo novedoso es que ya por fin hay una sala dedicada a la Prehistoria de Algeciras en el Museo Municipal, ya que antes había una dedicada al arco en el ámbito del Campo de Gibraltar, pero los yacimientos que han ido aflorando como el de Algetares y La Menacha ofrecen una comprensión además mucho más didáctica. El ánfora púnica (siglo V a III a. C.) se convierte en pieza destacada en la sala como uno de los vestigios más antiguos del paso a la historia antigua. 

Iulia Traducta

Emerge la ciudad romana. Antes había un espacio dedicado a la etapa antigua con pinceladas de la Algeciras romana, pero ahora es una sala con exclusividad con todo lo aportado por investigadores desde Salvador Bravo al arqueólogo municipal Rafael Jiménez. Incluye piezas de las últimas excavaciones en el parque de las Acacias como las joyas; hay una reconstrucción de la factoría de San Nicolás y una vitrina dedicada a la industria de salazón. La pieza más noble de la sala es el Pedestal de la diosa Diana, que apareció en la calle Trafalgar de forma descontextualizada en una obra, estudiada luego por Pedro Rodríguez, pionero del museo antiguo.

Medievo

De la invasión a la toma de los cristianos. En esta época anteriormente se había destacado la etapa musulmana, que fue la de mayor esplendor en este contexto. En el nuevo museo se arroja más exactitud en las diferentes etapas, pasando desde el 711 con la invasión musulmana a la toma de los cristianos. Destaca una pieza que testimonia la aportación cristiana a la fortificación de la ciudad, que apareció en las ruinas medievales por eso dejó de llamarse meriníes. Le sigue una sala llamada Tiempo Oscuro que testimonia los 300 años de abandono de la ciudad. 

La historia del edificio

Un hospital reconvertido en Casa de la Cultura en 1991. En el nuevo museo se destaca lo emblemático del edificio, que albergó el conocido hospital de La Caridad en el que han nacido muchos de los algecireños de hoy día. El edificio tuvo un cementerio propio en uno de sus patios. El 20 de mayo de 1991 tras la rehabilitación llevada a cabo por el Ayuntamiento pasó a ser la Casa de la Cultura, sede de la Fundación José Luis Cano. 

Contemporáneo 

El desarrollo urbano de la localidad y su Arte Sacro. En la sala moderna aparecen desde los diferentes planos de la época de Marqués de Verboom con todos los proyectos para la localidad a los asedios a Gibraltar, así como la aportación del General Castaños en el siglo XIX y la gran urbe del siglo XX, destacando la Conferencia Internacional de Algeciras con documentación del Archivo de las Actas Capitulares, el bando del alcalde Emilio Santacana y la placa que atestigua el acontecimiento histórico. Destaca además siguiendo el recorrido la colección de Arte Sacro con fondos de las hermandades y cofradías y piezas del convento, entre ellas la aportación de la cofradía de las Carmelitas. 

Lozas y azulejos

La sala 'Alejandro y Almoraima', dedicada al mecenas. Los fondos son del legado de Luis Carlos Gutiérrez Alonso, son piezas de plata y cerámica de uso comercial. Los textos ayudan al visitante a contextualizarse con Algeciras. De la plata cordobesa en la iglesia de la Palma se custodia una colección muy interesante que corresponde cronológicamente con las expuestas y que son del mismo platero y contraste cordobés. 

Bellas artes y exposiciones

De Zurbarán a Pérez Villalta . El museo ofrece nuevos espacios como la sala didáctica para los pequeños que realizará talleres. Le sigue la sala de exposiciones temporales dedicada a Ramón Puyol y Rafael Argelés que alberga actualmente una muestra de Mariano Bertucci llamada Marruecos en tinta y papel, cedida por Bernardo Villatoro. En la sala de Bellas Artes se comienza por la obra atribuida a la escuela de Zurbarán, siendo unas de las grandes joyas del museo por el valor del pintor en el siglo XVII, además se pasa por obras plásticas de artistas de la talla de Felipe Gayubo (obras donadas por su familia), de Antonio López Canales, Juan Jiménez Zahara, Pepe Barroso, José Román, Ramón Puyol, Juan Gómez Macías o Rafael Argelés, finalizando con dos piezas del pintor tarifeño Guillermo Pérez Villalta, uno de los artistas más reconocidos del panorama actual. Junto a esas salas se encuentra una pequeña biblioteca, mientras que el Gabinete de Arqueología se mantendrá en el Paseo de Victoria Eugenia.