En La Línea y de la mano de Juan Carlos Juárez, el GIL se hizo con 17 de los 25 concejales de la corporación. Su mayoría absoluta sirvió para desbancar de la Alcaldía al PP de José Antonio Fernández Pons, que cuatro años antes había logrado un histórico triunfo al romper la racha de dieciséis años consecutivos de mandatos socialistas, y además dejó reducida la oposición a los cuatro ediles obtenidos por los populares y a otros cuatro socialistas.

El sábado 3 de julio, fecha en que Juárez asumió el bastón de mando de la ciudad en un ceremonioso pleno, comenzó para esta ciudad una nueva etapa caracterizada por una tan espectacular como polémica gestión que llevó a un cambio en su imagen y a mejoras sustanciales en servicios como limpieza y seguridad ciudadana y, por otro otro, al juzgado al alcalde, algunos de sus concejales y responsables de la Policía Local en causas que en su mayoría siguen pendientes de juicio.

Asimismo, el progresivo aislamiento de la localidad y la descomposición del GIL obligaron al regidor a planificar muy pronto su salida de este partido para buscar cobijo en uno de los dos más importantes de implantación nacional. Así, en diciembre de 2000 intentó, con la connivencia de la entonces secretaria local del PSOE, Juana María Lasry, el desembarco de unos quinientos afiliados gilistas en este partido, pero la masiva petición de altas fue denunciada al comité federal por un amplio sector de la agrupación socialista, abortándose de este modo la operación y ordenándose la disolución de la ejecutiva linense. Apenas cinco meses después, este diario ya desvelaba que el regidor había iniciado negociaciones con dirigentes del PP para ingresar en esta formación, acuerdo que se hizo oficial el 23 de septiembre de 2001. Para intentar minimizar las acusaciones de ruptura del pacto antitransfuguismo, se ideó que el traspaso de unas siglas a otras se llevase a cabo a través de otra fuerza, el Partido Liberal Progresista Independiente que Juárez creó para ello. De este modo, los dos años que le quedaban de mandato los gobernó como independiente pero siguiendo ya las directrices del PP. No obstante, previamente tuvo que afrontar una controvertida asamblea local del PP en la que se aprobó su ingreso por muy escaso margen de votos.

En 2003 y 2007 Juárez repitió mayorías absolutas -20 y 15 concejales- como candidato popular.

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en san roque

En San Roque, la irrupción del GIL también resultó efímera, más aún que en La Línea, ya que en otoño de 1999, pocos meses después de haber obtenido seis escaños y de haberse convertido en la segunda fuerza del municipio, sus ediles se pasaron al grupo mixto.

El 3 de mayo de 2000, diez meses después de constituida la nueva corporación, este grupo de concejales que encabezaba Fernando Palma -número dos en la candidatura del GIL, ya que el cabeza de lista, Carlos Santos, se marchó al saber que no llegarían a la Alcaldía al comienzo del mandato- presentó una moción de censura contra el socialista José Vázquez junto a los del PP (3) y USR (3), lo que permitió a Palma convertirse en regidor el día 15 y hasta final de mandato.

Dicha moción no sólo fue criticada por dirigentes socialistas; la misma presidenta provincial del PP, María José García Pelayo, aseguró que los tres concejales de su partido serían sometidos a la apertura de un expediente. Luego, la realidad fue otra, hasta el punto de que se produjo la integración de los ex ediles gilistas en su partido y a las municipales de 2003 Palma ya concurrió como candidato del PP, venciendo con 8 concejales, aunque un pacto entre PSOE y USR -refrendado para el presente mandato- mantuvo a Vázquez en la Alcaldía.