Los vecinos de Castellar de la Frontera acompañaron la salida procesional de las tres imágenes titulares de la Cofradía del Santísimo Cristo de La Almoraima, Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de las Angustias. A las ocho de la tarde del Viernes Santo, la Plaza de Andalucía se encontraba prácticamente llena entre los vecinos y los muchos devotos que el Santísimo Cristo de La Almoraima tiene en el resto del Campo de Gibraltar, al que muchos confían promesas.

La procesión comenzó con la salida del Nazareno, seguido de la Virgen de las Angustias y, por último, el venerado Cristo de La Almoraima, talla de autoría desconocida y datada en el siglo XVI. Se trataba de la segunda Semana Santa en la que el Cristo de La Almoraima procesionó tras su restauración integral, realizada entre 2015 y principios del año pasado.

La hermandad lució durante la estación de penitencia nuevas cantoneras para la cruz del Nazareno, una imagen que procesiona en Castellar nuevo desde el año 2001. Antes lo hacía por los alrededores del Castillo de Castellar.

Otro de los estrenos fue la candelería renovada en el paso de la Virgen de las Angustias mientras que el Cristo de la Almoraima salió con nuevas cogidas para los cuatro hachones del paso. Desde hace dos años, las tres imágenes han vuelto a procesionar juntas tras varios años con desfiles tanto el Jueves Santo como el Viernes Santo.

Los chisparreros acompañaron a las imágenes durante prácticamente todo el recorrido, que llevó al cortejo desde la Plaza de Andalucía a la Avenida de las Adelfas, las calles Irida, Los Naranjos, Montaser Kattani y de vuelta a la Plaza de Andalucía para su recogida, al filo de la medianoche.