Los rayos de sol bañaban las paredes de la Capilla de Europa cuando el mayordomo llamó a la puerta lateral del templo para despertar un año más el Lunes Santo. Un minuto pasaba de las 19:30, la hora marcada para el arranque de la estación de penitencia de camino a la Iglesia de la Palma de la hermandad de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna y María Santísima de las Lágrimas. La Plaza Alta desbordaba devoción mientras en el templo los nazarenos empezaban a asomarse entre los nervios de los más mayores y la emoción de los pequeños.

El olor a incienso brotaba del templo mientras la comitiva reviraba hacia la calle Murillo. El Ayuntamiento, en su calidad de hermano mayor honorario de la hermandad, formó parte del orden procesional con el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, al frente y una amplia representación de la Corporación Local, del Tercio Duque de Alba 2º de la Legión que arropó a la hermandad y, como novedad, una representación de la cofradía del Ecce-Homo.

No se hizo esperar demasiado. Jesús Atado a la Columna abandonó el templo a las 19:52 ofreciendo la primera Levantá bajo el cielo con el acompañamiento musical de la banda de cornetas y tambores de la hermandad del Nazareno de Arahal (Sevilla). Empezó a desfilar mientras en las entrañas de la capilla volvía el trasiego de nazarenos y costaleros, que armaban filas para arropar la salida del templo de Las Lágrimas, entre ellos la Policía Local al ser patrona del cuerpo, mientras que el misterio fue acompañado de efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos con uniforme de gala.

Con mucho cuidado, usando ruedas movieron al paso de palio los costaleros en el interior de la capilla, empujando su camino hasta que rompió a sonar el himno de España por la banda de Nuestra Señora del Carmen de Villalba del Alcor (Huelva), que anunciaba el inicio de la procesión de la Virgen.

A las 21:03 miraba el Cristo hacia el interior del templo de la Palma, haciendo su estación de penitencia. La Plaza Alta y las calle de Algeciras se llenaron de ciudadanos para acompañar otro Lunes Santo especial.

Entre los estrenos estaba la tercera fase del paso del misterio, un tallado de la segunda mitad de los dos costeros del canasto y sus respectivas cresterías y moldurones. Destacados también fueron los visibles arcángeles, estrenando los dos que faltaban de los cuatro que forman el canasto del paso del Misterio.

La procesión, que de nuevo estuvo arropada por La Legión, desfiló por el barrio de San Isidro tras su paso por la Carrera Oficial, teniendo prevista su recogida en la Capilla de Europa sobre la una menos cuarto de la mañana.