Otro año será. Era la frase más repetida la tarde del Viernes Santo en Los Barrios. Sus pasos, el Cristo de la Buena Muerto y la Virgen del Mayor Dolor no pudieron realizar su Estación de Penitencia por la lluvia. La hermandad decidió a las 20:00 horas, momento previsto para la salida y tras consultar con Tráfico Tarifa, que los pasos no se pondrían en la calle. Las probabilidad de lluvia era del 90% y por tanto no se podía arriesgar. A la hora justo de la salida estaba lloviendo en La Villa.

Los hermanos decidieron que se abriría la puerta principal del templo para que entraran todos los fieles. Misión imposible en los primeros minutos. El atasco en la puerta impedía entrar o salir, hasta que abrieron la puerta lateral, que permitió un poco de desahogo, especialmente para los costaleros que vieron como de pronto una masa de fieles se acercaba a las imágenes.

Antes y para consuelo de los costaleros, las imágenes desfilaron desde el altar hasta su lugar habitual en la iglesia. Se vivieron entonces momentos de gran emoción en la que algunos cofrades, penitentes y mantillas -la virgen llevaba 19-, se limpiaban las lágrimas mientras la Banda Municipal de Música de Los Barrios interpretaba la marcha La muerte no es el fin y en el caso de la Virgen, El Costalero.

Durante al menos una hora la iglesia estuvo llena de fieles que contemplaban las imágenes y hacían fotos. Muchos hermanos y costaleros no querían despegarse de sus imágenes mientras recibían el consuelo de sus familiares y amigos. Habrá que esperar otro año para sacar las imágenes a la calle y rezar para que la lluvia no vuelva de nuevo a castigar los dos días grandes de la Semana Santa barreña. El Jueves Santo, el Nazareno y la Virgen de los Dolores tampoco pudieron procesionar. Ambas imágenes tuvieron que ser admiradas también en la iglesia de San Isidro.