No voy a intentar mentir, no todos los legionarios tienen un cuerpo musculado como los que salen en las revistas. Me consta que ni es necesario ni se les va a exigir. Eso sí, tanto la Brigada de Besmayah en Irak, como en Malí, o allí donde se encuentre de servicio un legionario en Ceuta, Melilla, Ronda o Viator en Almería, siempre cumplirán con su cometido y estáran preparados para lo que venga y que su profesión les exige. Da igual su peso, su edad, su graduación o su Unidad en el Tercio. Pero que les quede claro a todos esos sinvergüenzas cobardes que quieren hundir nuestro cuerpo con mentiras, la Legión ha sido, es y será noticia por su eficacia y por las misiones que se nos asignen, siempre en primera línea, durmiendo semanas en el suelo y comiendo raciones de combate, lo que haya, punto. Cumplirá su deber, obedecerá hasta morir, ya sean gordos, flacos o fibrosos. Desde el primero al último de los lejías tenemos algo que nunca tendrán ustedes, y que en español se llama "cojones".

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios