Cultura

Una sinergia de rimas a cuatro manos

  • Molina y Bartolomé presentan en Algeciras 'Tándem', poemario elaborado entre los dos autores

Los escritores Antonio Molina y Daniela Bartolomé han creado una singular colección de poemas, recogidos en el libro Tándem. Uno de los autores elaboraba una composición, que remitía al otro, que a su vez realizaba una suerte de respuesta también en forma de verso. Un diálogo de rimas, se podría decir. Esta comunicación de vates, con los poemas relacionados concretamente uno al lado del otro, es que la recoge la obra, editada con la colaboración de la asociación La Trocha de Algeciras.

Molina y Bartolomé han presentado su libro por diferentes lugares. Hoy lo harán en el algecireño hotel Reina Cristina a partir de las 20.30 horas. Los autores leerán sus poemas y escenificarán esa charla literaria que aparece en las páginas. La entrada al acto es gratuita.

El libro ha tenido una receptiva acogida. Salió hace dos meses y avanza por una segunda edición. Ha sido presentado en más de una docena de ocasiones. Una de sus señas de identidad es que ningún poema lleva la firma de su responsable, de tal manera que el lector desconoce si ha surgido de la pluma de Molina o de la de Bartolomé. Así las cosas, la sinergia es plena y hace honor al título del poemario.

Un ejemplo. Uno de los autores escribe: "¿Por qué campo o playa irá esa loca complaciente, que se niega a saludarme y se me niega a venir?". Es el comienzo de su poema. En el inicio de su correspondiente, obra del otro escritor -o escritora-, se observa: "Todos los caminos que recorro me acunan, me complacen, me arrullan, me saludan los ríos, mares y sus playas".

Antonio Molina reside desde hace muchos años en el País Vasco, pero es algecireño y se sigue sintiendo como tal completamente. Daniela Bartolomé nació en el País Vasco, pero vive en Madrid. El libro se anticipa con una cita del novelista húngaro Sándor Márai: "Al erotismo de la amistad no le hace falta el cuerpo... no le es atractivo, resulta incluso inútil. Sin embargo no deja de ser erotismo".

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