La Feria del Libro acogió ayer la presentación del octavo número de la revista literaria Aleceia, un acto al que acudieron muchos colaboradores y amigos de esta iniciativa cultura.

El concejal de Cultura, Alfonso Escuadra, destacó el trabajo del consejo de redacción de la revista y expresó su satisfacción porque Aleceia "se haya consolidado en fondo y forma". El edil destacó que "no es un coto cerrado a los creadores" y que al mismo tiempo "tiene un punto de calidad".

La responsable del aula de letras Gabriel Baldrich y miembro del consejo de redacción, Estefanía Sánchez, resaltó que a los colaboradores de La Línea y la comarca hay que sumar los textos venidos de otros puntos de Andalucía.

"Éste es un número especial y muy denso. Hemos tenido que dejar trabajos fuera porque tenemos un número limitado de páginas que aparecerán en el próximo número", apuntó Sánchez, que explicó que hay secciones habituales de Aleceia que no están en este número pero los lectores van a encontrar novedades. Para finalizar, apuntó que el objetivo es "entretener y dar nuestra pequeña aportación al mundo de la literatura".

Después le tocó el turno al escritor José Octavio Sánchez Machuca que presentó su novela El asedio del diablo. En esta obra, Sánchez Machuca narra la historia del oficial Beltrán Ochoa, presente en el ataque en noviembre de 1781, de un contingente de soldados británicos sobre las líneas españolas, cuya experiencia afectará su vida y tendrá que enfrentarse al amor, el miedo y el odio.

Hoy le toca el turno a José Riquelme, que presentará su obra Vida y obra de Gärtner, aunque antes Ángel Gómez Rivero será el encargado de dar la conferencia de clausura de la XXX Feria del Libro. La presentación de Cortos de Valerio de la Hoz Caravaca mañana pondrá el punto final.