Cultura

El litoral de la provincia, todo un patrimonio

  • Una muestra divulga la riqueza arqueológica subacuática, con el Estrecho en un papel principal

Una pieza de dominó, monedas, empuñaduras de sables y hasta una llave son algunos de los objetos que se pueden ver en el Centro de Arqueología Subacuática (CAS) de Cádiz desde ayer. El viceconsejero de Cultura, José María Rodríguez, inauguró Historias bajo el Mar, una exposición que pretende mostrar las investigaciones y descubrimientos llevados a cabo por los arqueólogos e historiadores del centro desde que se inauguró hace ya 10 años. Sin embargo, el CAS no sólo ha preparado esta exposición para divulgar su trabajo, sino que su objetivo primero es dar una visión del potencial arqueológico que se localiza bajo las aguas gaditanas y que los ciudadanos aprendan a valorarlo. En este sentido, el Estrecho de Gibraltar es una zona de capital importancia.

Historias bajo el Mar, cuyos comisarios son la directora del CAS, Carmen García Rivera, y el arqueólogo Carlos Alonso Villalobos, se abre con el dibujo de la planta de un navío de 74 cañones colocado en el suelo. Vitrinas llenas de restos arqueológicos y paneles explicativos completan esta muestra, que se divide en tres partes: Un mar de ánforas, Buceando en los archivos y La historia a fondo.

Un mar de ánforas cuenta historias de naufragios que han podido ser reconstruidas, a falta de otras fuentes de información, a través del análisis arqueológicos de los restos materiales conservados bajo el mar. Entre los ejemplos se citan naufragios de época fenicia a árabe. Un pequeño vídeo acompaña además la explicación de un pecio del siglo II a. C. hundido en aguas del Estrecho de Gibraltar a 282 metros de profundidad. Se trata de un navío mercante que iba cargado de salazones pescado y que ha dejado una buena prueba de cómo se comerciaba entonces.

Buceando en los archivos descubre uno de los secretos mejores guardados del CAS: la información custodiada en sus archivos. La historia a fondo da a conocer los navíos Fougueaux y Bucentaure.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios