La exposición Pintura, expresionismo y kitsch. La generación del entusiasmo, que contiene obras de los artistas tarifeños Guillermo Pérez Villalta y Chema Cobo, acaba de abrir en Castellón, tras haberse podido ver en otras ciudades de España. El Museo de Bellas Artes acoge hasta diciembre una muestra que es una aproximación a la pintura española de los años setenta y la primera mitad de los ochenta, comisariada por Joan Robledo.

Esta exposición se enmarca dentro del convenio de colaboración de la Fundación Chirivella Soriano con el Consorci de Museus y toma como base una selección de obras de este periodo procedentes de la colección de la Fundación que se exhiben por primera vez, así como otras obras cedidas por otros museos y colecciones como el Centro Artium de Vitoria.

El presidente de la Fundación, Manuel Chirivella, ha señalado que "el periodo pictórico que analiza esta exposición fue un tiempo en que transitaron coetáneamente conceptos tales como la ruptura con el arte de los 60, la formulación de un 'arte nuevo', la apertura de nuevos caminos para resucitar una idea de modernidad aún no conclusa y el 'retornos al origen', como explicación de una cierta derivada de algunos pintores españoles, que cosecharon un gran éxito hacia un cierto expresionismo que coincide con el llamado 'fin del entusiasmo'".

La muestra, lejos de ser concebida como una muestra antológica sobre los pintores y la pintura de los años setenta y ochenta, se articula en torno a aspectos como la creación del propio relato generacional, las relaciones entre la alta y la baja cultura, la reformulación de la pintura a partir de la deconstrucción de valores formalistas y, por último, la alineación de la pintura española con las tendencias de la pintura posmoderna europea.