Odyssey ha comunicado a España que sólo revelará la identidad del barco hundido del que extrajo un tesoro cuya propiedad reclama el Gobierno hasta que la compañía decida "corporativamente" hacerlo. Esta determinación vulneraría la orden de un juez federal de Tampa (Florida) según la cual la firma debe entregar a España toda la información relativa al botín. De hecho, según publicó ayer ABC, efectivamente los cazatesoros no han proporcionado todos los datos que le exige el Ejecutivo español.

El diario ABC añade que, en virtud de lo sucedido, España ha presentado dos mociones al tribunal estadounidense. En una reclama que la empresa, como está ordenado, entregue "toda" la información. En la otra denuncia el bloqueo sometido a los materiales aportados por la cláusula de confidencialidad.

Una vista el 5 de marzo decidirá si Odyssey ha cumplido.