El Auditorio Millán Picazo sirvió de escenario ayer para la presentación de la segunda novela del escritor algecireño Ángel Morán. Una mosca en la pared aúna los relatos de tres personajes que se apropian de la voz del narrador en cada capítulo. Con ello, Morán quiere que el lector "no se posiciones ni defienda a ningún personaje y que tenga una visión global", como explicó a este diario. Con esta obra, Ángel ofrece un drama familiar en el que cada personaje resulta ser víctima de sí mismo y de las decisiones que toman los demás.

La novela salió a la luz el pasado abril, tras cuatro años y medio de momentos de duro trabajo, desesperación, errores, arreglos y la "tentación de abandonar". El autor ha lanzado su último trabajo en internet a falta de editoriales que apuesten por su novela. La página ofrece descargar el libro a un precio muy económico además de la posibilidad de adquirir la obra bajo la impresión a demanda, una nueva tendencia que permite al lector disfrutar de la obra en formato papel y a la editorial un ahorro de costes considerable.

Morán agradece la colaboración de Mercedes Abad, el apoyo de su amigo Iñaki Santiago y la ayuda que recibió del curso que realizó en Barcelona mientras daba forma a la obra. "Recibíamos críticas sin compasión, pero he aprendido mucho y ahora puedo decir si esta novela es defendible o no está bien hecha. Me da esa capacidad". Actualmente, el algecireño está trabajando en su tercera novela, con la que, dice, está divirtiéndose mucho. Estima que antes de fin de año la obra puede estar acabada y avanza que la historia se desarrolla en Algeciras.