GANADERÍA: Novillos de Domínguez Camacho, bien presentados de poco juego. TOREROS: Juan Ortiz, silencio tras aviso y vuelta por su cuenta; Fernando del Toro, silencio tras aviso y silencio. Juan Luis Rodríguez, saludos y silencio. Incidencias: Plaza de toros de Las Ventas. Menos de un quinto de entrada.

El colombiano Juan Ortiz, que sustituía al ecuatoriano Juan Antonio Benítez en la primera del ciclo Ocho Naciones de Las Ventas, dio una vuelta al ruedo después de no acabar de entenderse con un cuarto novillo que, aunque manso, resultó el de embestida más vibrante del deslucido encierro en conjunto de Domínguez Camacho. Ortiz dio una vuelta por su cuenta. Con un primero, un astado que tomaba la muleta con brusquedad, abundaron los tirones. Puso voluntad y poco más.

El sevillano Fernando del Toro se encontró con un segundo muy flojo que debió ser devuelto. El novillero lo intentó pero el novillo se defendió cuando no perdió las manos. Con el quinto, un animal descastado, con el que puso voluntad, el hispalense volvió a evidenciar su falta de oficio.

Las mejores sensaciones las dejó el albaceteño Juan Luis Rodríguez. Ante su primero, gustaron las formas del manchego por el lado izquierdo, pese a la sosería y descastamiento del novillo. Con el sexto, un marmolillo que terminó por echarse, poco que hacer Juan Luis Rodríguez.