En la zona fronteriza del Tarajal, una de las que separa Ceuta de Marruecos, es posible ver a mujeres de 60 kilos cargando con bultos de más de 80. Dobladas por el peso y el esfuerzo, parecen plegadas a su única y dura forma de ganarse el pan. Sus ojos arrugados no escrutan la banalidad de las preocupaciones a este lado de la vida, a unos pocos kilómetros de mar. El fotógrafo ceutí afincado en La Línea Paco Guerrero, redactor gráfico de Europa Sur, se ha propuesto que aquí sí se pose la mirada sobre lo que ocurre allí, una áspera realidad desvelada en Frontera. La muestra, formada por 25 imágenes, se expone a partir de hoy en el museo del Istmo.

Frontera nació en abril de 2007 y sus primeros resultados fueron publicados en un reportaje en este diario. Guerrero se crió conviviendo con esas estampas de esos lugares de su ciudad y, a pesar de ello, lo que vio le impactó. Regresó un mes después a comprobar alguna posible variación de la situación, halló lo mismo y alimentó la serie con nuevas instantáneas, no sólo de las llamadas portadoras, también de toda la humanidad que cruza esa línea de división de dos mundos, donde a nado y sin embarcación se trasladan neveras por el agua.

"A tan pocos kilómetros se produce una forma de vida tan distinta a la que conocemos para buscarse la vida. Aquí nos preocupamos por algunas cosas que pierden sentido al ver aquello", explica el autor. "En mi ánimo está que la gente piense, que reflexione ".

La postura de Guerrero es fotoperiodística, atrapa en el objetivo ese momento y esa realidad y ofrece imágenes sin alteraciones, que en verdad no necesitan para conseguir su fin. Los resultados son espectaculares. Una de las fotografías, tomada en el paso de El Biutz, logró el segundo premio del prestigioso concurso convocado por la agencia Magnum y fue expuesta en el reputado festival de Arles.

La muestra se inaugura hoy a las 21.00 en el museo del Istmo de La Línea. Cuando acabe irá a la Casa de la Juventud y luego viajará a Madrid y a Sotogrande.