La Línea de la Concepción perdió hace algunas semanas una de las voces de su etapa dorada en la historia del flamenco, la de Miguel López El Comprende. López se destacó por dominar uno de los palos más complejos y a la vez populares del cante jondo, el de la saeta, que motivó que centenares de aficionados buscaran sus intervenciones al paso de las imágenes religiosas de Semana Santa. También lo hacía bien por fandangos.

La Peña Flamenca Cultural Linense recuerda en sus reseñas en la red que su devoción por la saeta le hizo ganar varios concursos de este palo. En 1979 cuajó una gran actuación en el colegio de Nuestra Señora de Las Mercedes junto a nombres míticos del flamenco de esta ciudad como Juanito Maravillas, el tocaor Juan Mesa y los bailaores David Morales y Sonia Landrove.

También figuró en el cartel del espectáculo que conmemoró los 50 años de Maravillas como cantaor, un intérprete con el que El Comprende mantuvo una gran relación de amistad. Miguel López nunca llegó a ser profesional y se mantuvo en la parcela de aficionado aunque eso no impidiera el interés de los seguidores de este arte.