La Crítica

'Eternos' maestros

  • El musical pone de manifiesto la versatilidad artística que poseían Paco de Lucía y Camarón 'Torres Bermejas', 'Fusiones' y 'El Retorno', tres capítulos de una simbiosis para la historia

eternos

Idea y guión musical: Salvador Andrades. Guión narrativo: Mónika Bellido. Imágenes fondo de escenario: Francis J. Benítez. Voz en off y presentación: María Quirós. Baile: Maite Banderas, Felipe de Algeciras, Mónika Bellido, David Lozano, Noelia Sabarea, Mercedes Alcalá, Macarena Andrades, Carmen Moncada, Mario de los Santos, José Luis Lías. Guitarras: José Carlos Torres, Carlos Rodríguez, Fran Muñoz, José Carlos Llave. Cante: María Montilla, María Delgado, La Manuela, El Lele, José El Tarasco, Rosa de Algeciras. Percusión: Chúster. Bajo: Néstor Urquía. Lugar: Parque María Cristina. Fecha: Domingo, 17 de julio. Aforo: Casi lleno.

En la historia del flamenco han existido dúos memorables, de esos que con la fuerza del destino encontraron una comunicación perfecta, un único mensaje realizado entre dos: una voz y una guitarra. Trasladándonos a los principios conocidos del flamenco recordamos las grandes obras de Don Antonio Chacón y Ramón Montoya. Si volvemos a lo más contemporáneo aún quedan imágenes en las retinas de La Paquera de Jerez con Parrilla, o Terremoto con Manuel Morao.

Pero si ha habido un dúo prolífico en la historia del flamenco ese es el compuesto por José Monge Cruz, Camarón de la Isla, y Paco de Lucía. Dos seres de especial sensibilidad que se encontraron para unificar discursos y engrandecer la cronología de esta cultura y de la música general.

Son tantas las generaciones que han sucumbido ante la fuerza expresiva de ambos que quizás nada de esto sería lo mismo sin la unión de los dos. Creadores de estilos, de formas, de lenguajes y hasta de conceptos. Y es por eso que la figura de Camarón tenía que estar presente en la sesión inaugural del III Encuentro Internacional de Guitarra dedicado al maestro Paco de Lucía.

Tanto uno como otro son y serán Eternos. Este es el título que anuncia el musical dedicado a la relación tan emblemática entre José y Paco. Tales son sus influencias que las nuevas generaciones siguen llevando a gala el legado recibido. Lo comprobamos en el espectáculo de ayer. Desde primer momento, el de Lucía, que tenía el sexto sentido propio de los genios, notó que la grandeza del de San Fernando daría que hablar. Por ello se unieron, José se dejó llevar y dieron vida a una decena de discos que son las bases, junto a los de algunos intérpretes más, del flamenco actual.

El encargado de dar la bienvenida fue el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, quien aseguró que esta muestra "sirve para rendir homenaje anualmente al hijo más ilustre de Algeciras". También, en su intervención inicial, tuvo unas palabras muy acertadas en memoria de Juan Peña, El Lebrijano, cantaor fallecido recientemente al que debemos una parte del actual flamenco.

El espectáculo, compuesto por veinticuatro artistas, se desarrolló en tres capítulos en los que se pudo comprobar la versatilidad de los dos artistas recordados. Partieron de Torres Bermejas, en la década de los sesenta, donde comenzaron a congeniar. Y sonaron temas como Canastera, alegrías, tangos y bulerías. Protagonismo del baile, sin duda. En la segunda etapa suena el piano, la guitarra, el bajo y la percusión, dando rienda suelta a la época más creativa de ambos, por separados. Finalmente, se reencuentran porque el destino caprichoso no permite que la grandeza se acabe. Emoción y público en pie, entre ellos, Pepe de Lucía. Dos artistas que ya son mitos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios