Cultura

Descubrir Carteia... en Baelo Claudia

  • El centro de interpretación del conjunto tarifeño acogerá desde el 20 de marzo una exposición con objetos del enclave sanroqueño que se propone mostrar cómo era la vida cotidiana en la antigüedad

El conjunto arqueológico de Baelo Claudia, más en concreto su centro de interpretación, acogerá desde el viernes 20 de marzo y hasta el 15 de mayo la exposición Descubre Carteia, que mostrará piezas del enclave sanroqueño y cuyo propósito es ilustrar sobre cómo era la vida cotidiana en la antigüedad, en los días de los Césares. La sala de exposiciones temporales de la sede de las ruinas tarifeñas será el lugar en el que se pueda contemplar una colección que ya se pudo ver en 2008 en Algeciras y que se inauguró en San Roque con motivo del tercer centenario de esta localidad.

Para la ocasión se va a cambiar la cartelería de la exposición y algunas distribuciones de las aproximadamente 120 piezas que la componen. El discurso básico es el mismo, mostrar una visión de Carteia extrapolable a cualquier otra ciudad de la época.

Descubre Carteia se remonta al origen fenicio del enclave sanroqueño, a su desarrollo púnico, a su esplendor romano e incluso tampoco se olvida del paso visigodo y bizantino. El objeto de la exposición es enseñar todos los elementos que ayudan a comprender ese día a día de la antigüedad. Aunque algunos parezcan intrascendentes, como clavos, vajillas, agujas de coser o anillos, poseen una valiosa información. Los hay que entonces se consideraban mágicos o protectores, según las supersticiones.

En las dos oportunidades precedentes la muestra se dividió en diversas áreas como arquitectura, termas, economía, cuidado personal, antigüedad, vida cotidiana u objetos de adorno.

La colección también recoge instrumental y diversos objetos relacionados con la pesca y la elaboración del garum -de los que puede dar tanta fe Baelo Claudia-y con otros sectores económicos de la ciudad como la alfarería.

Uno de los conjuntos más interesantes que presenta la muestra es el que forman los epígrafes, que guardan una información muy precisa. Quizá sea lo mejor de la exposición, por la variedad de lo que se ofrece.

La gran mayoría de las piezas proviene de los fondosde Carteia. Algunas, ocultas a los ojos del público hasta que vio la luz la iniciativa, fueron rescatadas de alguna caja y se descubren tras ser inventariadas.

En verdad la exposición ha representado el último paso de un largo trabajo de conservación realizado de forma silenciosa por un importante número de investigadores y arqueólogos durante años.

Como no podía ser de otra manera, la muestra no se limita a la mera exposición de las piezas que la integran, sino que también contiene paneles explicativos introducidos por textos históricos de autores clásicos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios