Cultura

"Damos un paso más, pero sin cortar las alas a nuestro baile"

  • Villamarta acoge esta noche, en el Festival de Jerez, el estreno de 'El aire que me lleva', donde destaca la presencia de David Montero como director de escena

Tres años después de su última propuesta conjunta, Cádiz de la Frontera, los bailaores Pilar Ogalla y Andrés Peña regresan a las tablas del Teatro Villamarta para poner en escena su nuevo montaje, 'El aire que me lleva', que estrenarán esta noche y en el que la principal novedad aparece en la incorporación de David Montero como director de escena.

-¿Qué es exactamente El aire que me lleva?

-Pilar Ogalla (P.O.): Pues creo que la gente se va a encontrar algo diferente a lo que estamos acostumbrados a presentar. Está claro que seguimos siendo fieles a nuestro estilo, de ahí no nos vamos a salir, pero sí hemos incorporado algunos aspectos. El aire que me lleva trata de la vida que tiene el artista, que en realidad va donde el aire te va llevando, nunca sabe lo que le va a deparar el destino. Es también un poco el miedo a entrar en lo desconocido contando siempre con el presente que tiene su vida.

-Andrés Peña (A.P.): Es bailar con nuestro estilo, que sigue patente, pero añadiéndole cosas más. No es ninguna sorpresa, porque en el flamenco está todo hecho, pero sí queremos mantenerlas en el anonimato. Se trata de un viaje musical, de dónde te lleva la música.

-En el anterior montaje, 'Cádiz de la Frontera', hablabais de dar un paso más por aquello de seguir un pequeño hilo argumental, algo que hasta entonces no habíais utilizado. ¿Qué cambio más significativo hay en este?

-A.P.: Quizás sea la presencia de David Montero en la dirección escénica. Ese es un tema que hasta ahora no lo habíamos tocado y la verdad es que estamos aprendiendo mucho. David es una persona flexible y con él se trabaja muy bien, porque sinceramente, no hubiera permitido que a mi baile, por ejemplo, se le cortase las alas. Por eso digo que vamos a seguir haciendo lo que sabemos, eso la gente lo debe tener claro. No es que vayamos a bailar 'El lago de los cisnes' o el Bolero de Ravel, que también estaría bonito (risas).

-Éste es vuestro tercer proyecto, ¿qué es lo que más cuesta teniendo en cuenta que si ya hablábamos de problemas económicos hace tres años, ahora ni les digo?

-P.O.: Cuesta, cuesta todo, sobre todo a nivel económico, pero nos lo tomamos como inversión y la ilusión de hacer proyectos nuevos.

-A. P.: Lo primero que haces cuando te sale una historia de este tipo es hablar del proyecto y eso todo lo ves bien, lo malo es cuando empezamos a hablar de números, porque te topas con el primer muro. Pero bueno, a veces en la vida hay que apostar y nosotros en ese sentido no tenemos problemas, tiramos para adelante y ya se arreglará.

-Resulta curioso que cuando todo el mundo se ampara en el pequeño formato debido a la crisis existente, Pilar Ogalla y Andrés Peña apuestan por algo más voluminoso....

-P.O.: (Risas) Es cierto, porque en realidad hoy día casi todo el mundo está apostando por formatos pequeños. En este caso, entendemos que actuar en el Teatro Villamarta es una oportunidad, por eso preferimos invertir y tirar de nuestra propia economía porque con lo que te da presupuestariamente el proyecto no tienes para llevarlo a cabo. Esto nos lo tomamos como un paso adelante, quizás porque no tenemos tantas oportunidades.

-A. P.: Quizás vayamos a contracorriente pero por la trayectoria que llevamos necesitamos hacer otra cosa. No bailar distinto, pero sí hacer otra cosa. Como Villamarta nos ha dado esta oportunidad, y es algo que agradecemos mucho, hay que lanzarse.

-P.O.: Es ir donde el aire te lleve pero sin ser la veleta. Nosotros no queremos ser una veleta, pero sí vamos donde el aire nos lleva porque el presente o el momento que vivimos te lo pide. El avance del flamenco o la calidad del baile actual te pide desarrollar algo que a lo mejor lo tienes ahí un poco dormido.

-Por lo general, Pilar Ogalla y Andrés Peña cuidan mucho el atrás, ¿ocurrirá esta vez también?

-A. P.: Sí, vamos a contar con la gente que suele venir con nosotros. Aparte del director de escena que he comentado antes, que será David Montero, vienen Ricardo Rivera, que ha sido el creador de la música, y Javier Patino, cuya música siempre se nota, viene El Londro y David Palomar al cante, viene Katumba a la percusión y algunos músicos más.

-Siempre hablamos de la crisis con un talante negativo, pero ¿tiene algo positivo?

-P.O.: Quizás ahora y ante la falta de presupuesto, los artistas estamos intentando echarnos una mano en distintas parcelas. Me explico, en nuestro caso, Belén Maya viene como ayudante de dirección escénica y esto lo está haciendo de forma altruista. La verdad es que nos está aportando muchísimo, nos da consejos profesionales que nos están viniendo muy bien.

-A.P.: Estoy de acuerdo. Con la producción que estamos haciendo ahora mismo, si no fuese por la aportación que hacen ellos todo sería más complicado porque el dinero que van a cobrar, por poner un ejemplo, no tiene nada que ver con el trabajo que están haciendo. Ahí entra juego la buena voluntad del artista y el compañerismo, como ha ocurrido con Belén, que para nosotros ha sido una sorpresa grata. Puede ser que eso esté uniendo un poco más a los artistas. Además, en este montaje hay algo distinto al resto y es que en el último, por ejemplo, todo lo hicimos nosotros y ahora hemos delegado más y eso se nota.

-El planteamiento que uno se hace cuando tiene que ir a Villamarta, ¿es el mismo que cuando el escenario es la Sala Compañía, por ejemplo?

-A.P.: Para mí, el marco del festival es el marco del festival, independientemente de dónde vayas. Lógicamente, el Villamarta tiene un peso extra, pero para mí, bailar ante un público supone una responsabilidad.

-P.O.: La responsabilidad es mayor en Villamarta, al menos para mí, y te complicas un poco más la vida cuando vas allí. Otra cosa es que en nuestro caso, cuando salimos a bailar, lo hacemos igual que si lo hiciésemos en cualquier otro escenario.

-Vuestro anterior montaje, 'Cádiz de la Frontera', ¿llegó a colmar lo que artísticamente esperabais de él?

-A.P.: Sí, entre otras cosas porque fue algo que hicimos los dos solos. Quizás tenga sus lagunas, al menos si hablamos desde el punto de vista teatral, pero a mí me satisfizo.

-P.O.: El resultado a mí me gustó, fue bastante digno, aunque es cierto que poco a poco se va redondeando.

-Mantener la línea que lleváis parece que choca un poco con la percepción de hoy día de introducir obligatoriamente elementos escénicos. ¿Os afecta?

-A.P.: Yo creo que no, porque es algo con lo que nunca he estado de acuerdo. Sé que eso enriquece y es bueno, pero el que vaya a ver flamenco, si te hacen una soleá muy buena, da igual que entre de una manera u otra. Lo que has visto es lo que querías ver en el baile. Es algo que siempre digo, esos son papeles de regalo.

-P.O.:Hay que buscar un equilibrio y eso es difícil. A lo mejor 'El aire que me lleva' no le gusta a la gente porque no está de acuerdo con el cambio que hemos dado o todo lo contrario, se encaja bien. Entiendo que para bailar bien no se necesitan tantas cosas. Me siento muy orgullosa de cómo soy y de cómo es él, no me quiero ir para otro lado. Me encanta que me aconsejen pero no quiero cambiar mi forma de bailar.

-Han tenido siempre un lugar en Jerez, pero y en Cádiz, ¿lo tienen también?

-A.P.: Me alegra que me haga esa pregunta porque lo de Cádiz está complicadísimo. Hemos presentado 'Cádiz de la Frontera' por aquello de La Pepa y nos lo han aceptado en Flamenco Viene del Sur. El problema es que no sé que pasa que no nos dan fecha, y eso que está aprobado. Ahora mismo tenemos los cinco sentidos en el Festival, pero en cuanto pase vamos a ver qué pasa.

-P.O.: Es una pena y como gaditana me siento decepcionada. Hemos llevado nuestros espectáculos por todos sitios, Festival de Jerez, Bienal, Mont de Marsan..., y en mi teatro, nada. Cuando ya por fin conseguimos que nos acepten un proyecto no sé qué pasa que no podemos actuar.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios