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Trump: "Yo no soy racista"

  • El presidente niega que usara la expresión "países de mierda" pero varios presentes en la reunión de la pasada semana constatan los insultos

Trump saluda a dos marines antes de un viaje la pasada semana.

Trump saluda a dos marines antes de un viaje la pasada semana. / Chip Somodevilla / efe

Donald Trump negó que sea racista al ser preguntado en Florida por periodistas tras la polémica originada por sus declaraciones en las que llamó "países de mierda" a naciones de África o a Haití. "Yo no soy un racista. Soy la persona menos racista que has entrevistado. Qué te puedo decir", respondió el mandatario brevemente al ser cuestionado cuando llegaba a cenar al Trump International Golf Club en West Palm Beach, su resort en Florida.

El presidente estadounidense desmintió el pasado viernes una información de The Washington Post, según la cual dijo en una reunión sobre inmigración que Haití, El Salvador y los países africanos son "países de mierda".

Pero el senador Dick Durbin afirmó que las acusaciones eran verdaderas y que Trump había usado un lenguaje "lleno de odio, vil y racista" durante la reunión. Varios legisladores republicanos de alto rango en la reunión, incluido el secretario de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, dijeron que no recuerdan a Trump haciendo el comentario.

Otro senador republicano que estaba presente, Lindsey Graham, no negó las afirmaciones. "Después de los comentarios del presidente, me dirigí directamente a él. Él y todos los asistentes a la reunión saben lo que dije y cómo me siento", aseguró Graham. El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, subrayó que las declaraciones de inmigración de Donald Trump fueron "muy desafortunadas" e "inútiles".

Sin embargo, el presidente de EEUU escribió después en su cuenta de Twitter que "el lenguaje que usé en la reunión de DACA (programa para los inmigrantes llegados en la infancia a Estados Unidos) fue duro, pero éste no es el lenguaje que usé". Pese a su desmentido, el jefe de la Casa Blanca recibió duras críticas de los países aludidos, entre otros.

El Gobierno haitiano se mostró "indignado y conmocionado" por unas declaraciones que, "de ser ciertas (...), reflejarían una visión simplista y racista totalmente equivocada de la comunidad haitiana y su contribución a los Estados Unidos".

El Gobierno de El Salvador anunció que había enviado una nota de protesta a Estados Unidos y exigió "respeto" para los ciudadanos salvadoreños.

La Unión Africana (UA), que congrega a 55 estados y varios Gobiernos de ese continente, tachó de "racistas" los comentarios atribuidos a Trump. Una portavoz de la UA indicó que, incluso aunque el mandatario los haya negado, no dejan de ser "preocupantes", porque "hay un patrón de declaraciones y actos previos".

Además, los embajadores ante la ONU de 54 países africanos exigieron a Trump una disculpa por los comentarios "racistas" que expresó el pasado jueves. Condenaron también los "escandalosos, racistas y xenófobos" comentarios del gobernante, y aseguraron sentirse "preocupados por la continúa y creciente tendencia dentro del Gobierno estadounidense hacia África y hacia los afrodescendientes denigrando al continente y a las personas de color".

La Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color acusó al presidente de caer "cada vez más profundo en el agujero del racismo y la xenofobia". Varios representantes demócratas avisaron de que no asistirán al discurso del Estado de la Unión del presidente a finales de mes por sus acusaciones racistas.

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