Maritimas

Perdón por los 100 millones

Los 100 millones de toneladas alcanzados por el puerto de Algeciras en el pasado ejercicio dan para mucho, para felicitaciones y también para disculpas. Lo primero ya lo hice en cuanto se conoció la noticia. Hoy toca lo segundo.

Disculpas, en primer lugar, a nuestros trabajadores. Cuando entró en vigor el último convenio colectivo de las autoridades portuarias, en 2004, nuestro puerto movía 66 millones de toneladas. El convenio finalizó en 2009, llevamos más de 7 años esperando un nuevo convenio y el tráfico portuario supera ya los 100 millones.

Disculpas por crecer tanto, el puerto que más crece de Europa, con tan pocos medios

Entre los Top 10 de Europa, Algeciras es, según Eurostat, el puerto que mayor tasa media anual de crecimiento ha experimentado en los últimos 17 años. A pesar de este espectacular crecimiento, el Ministerio de Hacienda mantiene congelada la plantilla de personal excluido de convenio de esta Autoridad Portuaria desde hace ya más de 11 años. ¡Y la mantiene congelada en un número de efectivos que es inferior a la mitad del que tienen autorizado otros puertos españoles respecto de los cuales Algeciras mueve más del doble de mercancías! Disculpas también por crecer tanto con tan pocos medios.

Disculpas a los usuarios del Puesto de Inspección Fronteriza (PIF), que ven con desesperación cómo sus mercancías pierden valor en los mercados porque, mientras en los últimos 5 años el número de inspecciones se incrementó en nuestro PIF en un 40%, en ese mismo periodo el número de inspectores se redujo a la mitad. Disculpas también a estos inspectores, que soportan sobre sus espaldas gran parte del crecimiento de este puerto.

Hace 10 años solicitamos una ampliación de potencia eléctrica. Llevamos invertidos ya 38,5 millones de euros en la parte que nos corresponde de este proyecto y todavía tendremos que aceptar cortes de luz de hasta 4 semanas al año, mientras Red Eléctrica no acometa las obras del doble circuito a Pinar del Rey, que aún no han comenzado. Disculpas a las grandes multinacionales que apuestan por este puerto a pesar de tener que utilizar en sus terminales grupos electrógenos propios para paliar esta situación.

Disculpas por no haber sido suficientemente convincentes al defender la primacía de la paz social sobre los costes, aunque solo fuese por el hecho de que un solo día de parada de los puertos españoles costaría a la economía del país más que un año entero de multas con las que nos amenaza la Comisión Europea. Tampoco lo deben estar haciendo tan mal nuestros estibadores cuando el pasado año nos otorgaron el segundo premio al puerto de contenedores más productivo de Europa y el año anterior, el tercero.

Disculpas, sobre todo, por no haber sabido transformar los 100 millones de toneladas en 100 millones de razones para que se reanudasen las obras de la Algeciras-Bobadilla. Los más de 681.750 camiones -un camión cada 46 segundos- que la comarca puso en ruta el pasado año tampoco han servido para que se moviese ni una sola traviesa.

Perdón, finalmente, por no haber sido capaz de arrancarle a Madrid ni un solo olé por tanto esfuerzo colectivo.

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