Once alcaldes de otras tantas ciudades españolas firmaron ayer en Castellón un decálogo para la defensa del Corredor Mediterráneo, en el que hacen un llamamiento al Gobierno español y a la Unión Europea (UE) para que incluya este eje como "infraestructura prioritaria" en la inminente revisión de la Red Central Transeuropea de Transporte. A esta firma también mostró su apoyo el Ayuntamiento de Cádiz, cuya alcaldesa no asistió.

El secretario general de Relaciones Institucionales del Ministerio de Fomento, Fernando Puig de la Bellacasa, asistió también a la cumbre de capitales del Arco Mediterráneo y afirmó que el Corredor Central -el que defienden los agentes sociales y económicos de la Bahía de Algeciras- y el Corredor Mediterráneo "son absolutamente compatibles y complementarios".

El presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, recalcó que el eje Mediterráneo "significa prosperidad y futuro y no supone ir contra nadie". "Solo queremos que España y Europa tengan más oportunidades", dijo.

Los alcaldes de Girona, Barcelona, Tarragona, Castellón, Valencia, Alicante, Murcia, Almería, Granada, Málaga, Cádiz y Palma de Mallorca acordaron trasladar el documento a todos los grupos parlamentarios autonómicos, nacionales y europeos, así como a los grupos políticos de los 12 ayuntamientos representados, para de que trasladen a las cámaras y a los correspondientes plenos municipales el contenido del decálogo.

El documento tiene como objetivo impulsar, aglutinar y reforzar la reivindicación conjunta de 12 capitales de provincia del Mediterráneo ante el Gobierno de España y la Unión Europea con el fin de que se incluya el Corredor Mediterráneo como "infraestructura prioritaria".

En el decálogo se reivindica este eje como uno de los "esenciales" y "prioritarios" para la cohesión de Europa y España y que garantiza la conexión del continente con el gran eje del comercio mundial, que une Extremo Oriente y la India con EEUU y Sudamérica, eje que canaliza la entrada y salida de mercancías por Suez y Gibraltar a través del frente portuario del Mediterráneo español.

Alberto Fabra manifestó que el acuerdo alcanzado "representa un compromiso con nuestro territorio para el futuro de España y Europa, un compromiso de suma de territorios, de partidos y sectores sociales y económicos, con el que hemos querido poner negro sobre blanco la importancia de que el Corredor Mediterráneo sea el eje prioritario de la Comisión Europea".