El Consejo de Ministros aprobó ayer por Real Decreto la actualización de la regulación de ayudas para la construcción de buques e inversiones en I+D+i del sector naval, que será válida hasta 2020.

En concreto, se refuerzan las líneas de apoyo financiero a los armadores para la construcción de buques de más de cien toneladas brutas y se aumenta el apoyo a los proyectos de I+D+i realizados por los astilleros.

El objetivo de las ayudas es fomentar la modernización del sector naval y su competitividad a nivel internacional y acompañarle en su digitalización.

Según el Gobierno, el Real Decreto sobre el apoyo en forma de subvención al tipo de interés de los créditos para la construcción de buques flexibiliza y moderniza los instrumentos hasta ahora existentes para este fin.

Además, introduce algunas novedades, como regular que, tras la entrega del buque, el beneficiario podrá solicitar la autorización del órgano instructor para que la devolución del crédito vivo sea asumida por una entidad de crédito, una compañía de su grupo o un tercero. Asimismo, incluye a los buques de pesca como objeto de estas ayudas y actualiza la documentación a presentar para la justificación.

En cuanto a las principales novedades en normativa de financiación de la I+D+i, se incorporan mejoras como el nuevo acceso a ayudas a la innovación en materia de organización y se refuerza la intensidad de las ayudas en los casos de pequeñas y medianas empresas.